La lucha internacional por ganar el concurso indio de 114 nuevos aviones de combate (MRFA) cobra fuerza. La compañía transeuropea Airbus ofrece la futura versión mejorada del avión del caza Eurofighter Typhoon, conocida como Tranche 5 (Serie 5 en francés), para incrementar sus opciones en este programa valorado en más de 15.000 millones de dólares.
Airbus es, con el 46% de la propiedad, el socio mayoritario de la compañía Eurofighter GmbH, encargada de este modelo. Los otros dos dueños son la firma británica BAE Systems, en cuyas manos está el 33% de la compañía, y la italiana Leonardo, propietaria del 21% restante. Las ventas internacionales de este avión desarrollado por Alemania, Reino Unido, Italia y España se encomiendan en cada caso a uno de los socios. Aquí es Airbus la que se ocupa de competir en un programa que la India lleva años preparando.
Los contrincantes son las compañías estadounidenses Boeing y Lockheed Martin, que optan respectivamente con sus modelos F/A-18E/F Super Hornet y F-16, la sueca Saab, fabricante del Gripen E; la rusa Mikoyan, que ofrece su MiG-35, y, sobre todo, la francesa Dassault, fabricante del Rafale. Este modelo es el gran rival de Eurofighter en el mercado indio, en el que llevan años enfrentándose, con mejor balance, de momento, para Francia. En 2016, Nueva Delhi ya adquirió 36 Rafale de la versión convencional. Y posteriormente, en 2023, encargó otras 26 unidades, en esta ocasión de la variante naval, Rafale M, concebida para operar desde portaaviones.
En 2012, la India eligió también el avión de Dassault, frente al Eurofighter, como su mejor opción para una compra prevista de 126 aviones por un precio estimado entonces en 12.000 millones de euros. Finalmente, el proyecto no siguió adelante, de ahí la compra posterior de únicamente 36 Rafale y el concurso actual por 114 unidades de un fabricante aún no elegido.
Radar AESA, al fin
En aquel momento, 2012, se justificó la derrota de Eurofighter por no equipar todavía dos elementos que se consideraron esenciales: un radar de barrido electrónico activo (AESA) y misiles Meteor. Ahora el panorama es otro, y los aviones de la Serie 5 ya montarán estas capacidades, entre otras más avanzadas de lo disponible ahora.
El portal local especializado India Defence, que ha recogido los planes actualizados de Airbus para este concurso, apunta que la versión modernizada, además de “un potente sistema de radar AESA, que brinda a los pilotos un conocimiento incomparable del campo de batalla”, incluye mejoras de sus sistemas defensivos, de comunicaciones y de la interfaz (conexión) del piloto del caza.
Amraam, Asraam, Iris-T, AIM-9L…
La fuente concreta que el modelo Tranche 5 ofrecido a la India incluye tecnologías del programa de Evolución a Largo Plazo (Long Term Evolution – LTE) del avión. El LTE se centra en avances en sistemas de misión, interfaces piloto, flexibilidad operativa y rendimiento del motor que, además, suponen mejoras que permiten posicionar a la aparato en el futuro sistema de combate aéreo (FCAS, por sus siglas en inglés) que desarrollan a partes iguales Francia, Alemania y España.
El medio indio detalla también que el Eurofighter propuesto para su país contará con una letal combinación de misiles aire-aire, entre los que cita los Amraam, Asraam, Iris-T y AIM-9L, junto a bombas guiadas por láser. De este modo, el caza será capaz de desarrollar una amplia gama de misiones, para las que podrá volar largas distancias en vuelos supersónicos.
Eurofighter prevé vender en la próxima década cerca de 300 unidades más, según un informe que acaba de publicar la consultora PwC. Estas expectativas, claves para la continuidad de la producción a largo del modelo, incluye 38 unidades ya comprometidas por Alemania; otras 45 para España; 74 más para sus distintos socios, aunque no se ha especificado cómo podrían repartirse, y 130 de exportación. En estas últimas podrían incluirse los 114 aparatos que busca la India. De cuajar la venta, el Typhoon se aproximaría a los los mejores números que maneja Rafale en el mercado internacional. Si bien las ventas totales del modelo britano-germano-italo-español son mayores, debido a las adquisiciones de sus cuatro socios.