España ha decidido al fin armar sus drones Predator B en servicio en el Ejército del Aire y del Espacio. El elegido para dotar a estos RPAS con capacidad de ataque a objetivos terrestres es el AGM-114 Hellfire, un misil guiado aire-superficie de corto alcance desarrollado por la estadounidense Lockheed Martin con un precio por unidad que ronda en la actualidad entre los 120.000 y los 150.000 dólares.
Este tipo de misil permite atacar desde el aire a pequeñas unidades o dar apoyo aéreo a las operaciones. Tiene un peso de unos 45 kg, una longitud de 1,6 m y un alcance efectivo de hasta unos 8 kilómetros, y está guiado por láser. Hace unas semanas, en el campo de maniobras de las Bardenas Reales en Navarra, uno de los Predator españoles efectuó un ejercicio de guiado láser de un misil lanzado desde un avión de combate F-18, como publicó Infodefensa.com.
Esta misión pone de manifiesto que el 223 Escuadrón del Ala 23 de la base aérea de Talavera la Real (Badajoz), responsable de la operación de los Predator, lleva ya un tiempo preparándose para el empleo de armamento desde estos drones.
El Hellfire es realmente una familia de misiles que comenzó con el AGM-114A y va ya por el AGM-114R, con varias mejoras, diseñado para su lanzamiento desde todo tipo de helicópteros y drones. Lockheed Martin comenzó su producción en los años 80 del siglo pasado y sigue fabricando en la actualidad las versiones más avanzadas. La mayor parte de las versiones posteriores a la K se conocen ya como Hellfire II.
Puede incorporar tres tipos de ojivas: antitanque con alto poder explosivo (Heat) para objetivos blindados; de fragmentación para objetivos urbanos y carga aumentada con metal para estructuras urbanas o búnkeres. También está la versión R9X, con una ojiva cinética y cuchillas desplegables, muy utilizada por Estados Unidos en ataques quirúrgicos a zonas urbanas en Irak y Afganistán contra dirigentes talibanes y de grupos terroristas para reducir los daños colaterales.
Por el momento, no se conoce que modelo ha seleccionado el Ejército del Aire y del Espacio para sus Predator B. Entre las opciones sobresale el AGM-114R Hellfire II que emplearán también los nuevos helicópteros Romeo de la Armada. El pedido, este caso, incluye una treintena de misiles de esta versión.
Este misil ya está en el inventario de las Fuerzas Armadas españolas, más concretamente, en la Armada. Actualmente, el SH-60B Seahawk de la Décima Escuadrilla de la Flotilla de Aeronaves es la única aeronave española que tiene la capacidad para lanzar este tipo de misiles. El primer lanzamiento en un misil Hellfire desde este helicóptero a finales de 2020 en el campo de maniobras de San Gregorio en Zaragoza.
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