Sikorsky y Boeing confirman que optarán al helicóptero pesado alemán

Las compañías estadounidenses Sikorsky (propiedad de Lockheed Martin) y Boeing han respondido formalmente a la llamada con que la Fuerza Aérea Alemana les invitó a presentar opciones a su concurso de helicópteros pesados. Sikorsky prevé ofrecer su CH-53K King Stallion a la solicitud oficial de propuestas que se estima que será emitida este verano. Por su parte, Boeing tratará de hacerse con el contrato ofertando su CH-47 Chinook.

Entre las bazas del CH-53K King Stallion, Sikorsky asegura que es el único helicóptero pesado “que continuará en producción hasta el año 2032 y más allá”, de acuerdo con el comunicado emitido por la empresa para anunciar su entrada en el concurso. Se trata, añade la fuente, de “un helicóptero de carga pesada seguro y fiable que puede entrar en servicio perfectamente sin la necesidad de actualizaciones durante las próximas décadas”.

En la nota, la empresa norteamericana recuerda que cuenta con socios en la industria alemana para este programa, “incluido Rheinmetall”, con la que alcanzó un acuerdo el año pasado, como informó entonces Infodefensa.com.

Por su parte, Boeing ha anunciado su respuesta al concurso alemán mediante un mensaje en la red social Twitter.

Berlín aprobó en el último trimestre del año pasado un desembolso de 5.600 millones de euros para este programa. Se trata de una cifra notablemente mayor a los 4.000 millones calculados anteriormente para esta compra. La cifra lleva a pensar que el número de helicópteros que finalmente será encargado se aproximará a 60, que es la cifra más alta contemplada en el plan alemán (la mínima son 45 aparatos).

Berlín lleva tiempo buscando la sustitución a largo plazo de los helicópteros CH-53G con los que cuenta desde su adquisición en 1968. En su momento incluso trató de formar equipo con Francia para el lanzamiento de un programa de aeronaves de ala rotatoria para tareas de transporte. En 2004 trascendió un nuevo concepto franco-alemán denominado Helicóptero de Transporte Pesado (HTH, por sus siglas en inglés). La iniciativa perseguía la adquisición de un centenar de las nuevas aeronaves, sin embargo el proyecto no llegó a tomar impulso.

El contrato finalmente se lo disputan básicamente dos compañías estadounidenses, Lockheed Martin –propietaria desde 2015 del fabricante Sikorsky– y Boeing. La primera ofrece su aeronave CH-53K King Stallion y la segunda el CH-47 Chinook. Si no se producen contratiempos, las primeras entregas de las nuevas aeronaves tendrán lugar a principios de 2023.