El primero de los seis submarinos de ataque con propulsión nuclear del tipo Barracuda para la Marina de Francia ha comenzado sus pruebas de mar. El buque, que fue botado el pasado julio, está siendo sometido estos días a distintos ensayos que permitirán a la Dirección General de Adquisiciones (DGA) y a la Marina francesa comprobar el comportamiento de la nave antes de su entrega, prevista para finales de este mismo año.
El presidente y consejero delegado (CEO) de Naval Group, constructora del submarino bautizado como Suffren, Pierre Eric Pommellet, ha explicado que estas pruebas comienzan con las medidas necesarias para respetar “el estricto cumplimiento de las medidas de salud y seguridad para proteger a la tripulación” frente a la extensión del Covid-19.
Las pruebas de mar que han arrancado ahora llegan después de que el pasado diciembre se comprobase el funcionamiento del reactor nuclear que alimenta la nave y se realizasen ensayos de atraque.
Estos ensayos sirven para comprobar la estanqueidad en ambientes subacuáticos y la maniobrabilidad de la nave; el comportamiento del sistema de combate, de las armas tácticas y del equipo de alta tecnología; y el funcionamiento del buque a pleno rendimiento de sus capacidades operativas.
Los submarinos de la clase Barracuda sustituirán a los seis buques de propulsión nuclear de la clase Rubis, los Rubis (S601), Saphir (S601), Casabianca (S601), Emeraude (S601), Améthyste (S601) y Perle (S601), recibidos entre 1983 y 1993 y operados por la Escuadrilla de Submarinos Nucleares de Ataque (ESNA), con sede en la Base Naval de Toulon. Los submarinos de la clase Suffren permitirán mejorar significativamente la capacidad de disuasión de la Fuerza Oceánica Estratégica (FOST) de la Marine Nationale.
Cada Barracuda tendrá un desplazamiento de 4.700 toneladas en superficie y 5.100 toneladas en inmersión, una longitud de 99.9 metros y un diámetro de 8,8 metros. Su velocidad máxima será de 25 nudos y estará tripulado por 63 personas.
Estas naves tendrán la capacidad de emplear torpedos pesados de 533mm Naval Group F21, misiles MdCN y Exocet SM39 Block 2 Mod 2 de MBDA Systems, lanzadores de deceptivos antitorpedos y minas FG29, y acoger vehículos submarinos no tripulados y fuerzas de operaciones especiales y sus equipos. El sistema de gestión de combate Sycobs, el sistema de sonar integrado Thales UMS 3000 y un sistema de propulsión híbrido, son otros de los principales sistemas instalados en el Barracuda.