La UE lanza la iniciativa para que sus ejércitos se muevan más rápido

La Comisión Europea y el Alto Representante han presentado el nuevo Plan de Acción sobre Movilidad Militar 2.0 con el que la Unión Europea pretende agilizar su capacidad de respuesta frente a una amenaza exterior, al facilitar el desplazamiento de tropas entre sus fronteras. Al mismo tiempo, ambas instituciones han lanzado una Comunicación Conjunta sobre la política de ciberdefensa de la UE. En ambos casos, se busca “hacer frente al deterioro del entorno de seguridad tras la agresión de Rusia contra Ucrania y aumentar la capacidad de la UE para proteger a sus ciudadanos e infraestructuras”, de acuerdo con la información facilitada por la Comisión Europea.

El organismo especifica que este Plan de Acción sobre Movilidad Militar “ayudará a las fuerzas armadas europeas a responder mejor, con mayor rapidez y en la escala suficiente a las crisis que surjan en las fronteras exteriores de la UE y más allá”. Con él se “reforzará la capacidad de la UE para apoyar a los Estados miembros y socios en lo que respecta al transporte de tropas y su equipo”. La iniciativa, precisa, “trabaja hacia una infraestructura mejor conectada y protegida, al tiempo que simplifica los problemas regulatorios”. Con ella, igualmente, se “reforzará la cooperación con la OTAN y promoverá la conectividad y el diálogo con socios clave”.

La nueva Movilidad Militar cubre el periodo comprendido entre este 2022 y el ejercicio 2026 y se configura “sobre la base de los logros de la primer Plan de Acción lanzado en 2018”. En aquel ejercicio, la entonces Alta Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Federica Mogherini, adujo que al facilitar “la movilidad militar en el seno de la Unión podemos ser más eficaces a la hora de prevenir crisis, más eficientes al desplegar nuestras misiones y más rápidos al reaccionar ante los retos que se nos presenten”. La Comisión Europea, por su parte, dejó plasmado que considera  esencial facilitar el movimiento de tropas y equipos militares para la seguridad de los ciudadanos europeos y para construir una Unión más eficaz, coordinada y con capacidad de reacción.

Amenaza rusa

En aquel momento Rusia aparecía como un foco de tensión frente a la Unión Europea, sobre todo a cuenta de su política en Ucrania, a raíz de la adhesión de la península de Crimea cuatro años antes. Ahora, en cambio, Moscú representa una amenaza más tangible que los miembros de la UE tratan de contrarrestar en el frente ucraniano, tras el inicio de la invasión del Kremlin el pasado 24 de febrero, suministrando ayudas directas a Kiev, incluido armamento.

La Comisión Europea destaca seis elementos incluidos en el nuevo plan. El primero se centra en la “identificación de posibles brechas en la infraestructura, informando acciones futuras para priorizar mejoras e integrar los requisitos de la cadena de suministro de combustible, para apoyar movimientos de fuerzas militares a gran escala con poca antelación”. El siguiente versa sobre la “digitalización de los procesos administrativos relacionados con la logística aduanera y los sistemas de movilidad militar”. El tercer elemento contempla “medidas para proteger la infraestructura de transporte de ciberataques y otras amenazas híbridas”. Otro más trata acerca del “desarrollo de capacidades de elevación estratégica militar para mejorar la movilidad de las fuerzas armadas por aire y mar”. El quinto busca “mejorar la eficiencia energética y la resiliencia climática de los sistemas de transporte”, y el sexto “reforzar la cooperación con la OTAN y socios estratégicos clave, como EEUU, Canadá y Noruega, mientras se promueve la conectividad y el diálogo con socios regionales y países de la ampliación, como Ucrania, Moldavia y los Balcanes Occidentales”.

Red bien conectada y financiada

Con este objetivo de “garantizar una red bien conectada, capaz y segura red de movilidad militar, la Comisión Europea está apoyando el Plan de Acción con instrumentos de financiación como el Connecting Europe Facility, que financia proyectos de infraestructura de transporte de doble uso, y el Fondo Europeo de Defensa, que apoya el desarrollo de sistemas logísticos y digitales interoperables”.

Como se ha apuntado, el primer Plan de Acción sobre Movilidad Militar se lanzó en 2018 buscando fortalecer la Política Común de Seguridad y Defensa de la UE. “Su objetivo era garantizar un movimiento rápido y fluido de personal, material y activos militares, incluso con poca antelación y a gran escala, dentro y fuera de la UE”. Su puesta en marcha, de acuerdo con sus responsables, ayudó a crear una red bien conectada, con tiempos de reacción más cortos e infraestructura y capacidades de transporte capaces, seguras y resilientes.

Brújula Estratégica

El nuevo Plan de Acción sobre Movilidad Militar responde al llamado de la Brújula Estratégica, la iniciativa pergeñada por el actual Alto Representante y Jefe de la Agencia Europea de Defensa, Josep Borrell, que fue aprobada por los ministros de Exteriores y de Defensa de los 27 miembros de la UE el pasado marzo como línea geopolítica común para enfrentarse a nuevas amenazas.

En este caso, mejorar la movilidad militar de las fuerzas armadas de los países miembros, tanto dentro como fuera de la Unión Europea, resulta todavía más necesario “tras la agresión militar de Rusia contra Ucrania”. Se trata de una “necesidad urgente” que “también se reflejó en la Comunicación conjunta sobre las brechas de inversión en defensa adoptada en junio de 2022”.

La movilidad militar europea cuenta además con el apoyo de otras iniciativas de defensa, en particular a través del proyecto de Movilidad Militar de Cooperación Estructurada Permanente (Pesco), el proyecto de centros logísticos, el programa de la Agencia Europea de Defensa (EDA) sobre Optimización de los Procedimientos de Permiso de Movimiento Transfronterizo en Europa y la Revisión Anual Coordinada de Defensa (CARD).

Cada segundo importa

Sobre el nuevo Plan de Movilidad Militar, el Alto Representante y Vicepresidente, Josep Borrell, ha explicado que una de “las principales lecciones de la entrega de armas y equipo militar a Ucrania para luchar contra la invasión de Rusia es que cada segundo importa”. Y en este contexto “la movilidad militar rápida es crucial para responder a las crisis que surgen en nuestras fronteras y más allá”. En este marco “se ha hecho mucho hasta la fecha, pero la Brújula Estratégica ha establecido ambiciones más altas y estamos cumpliendo. Con este nuevo plan de acción sobre movilidad militar, abordaremos los cuellos de botella existentes para permitir un movimiento rápido y eficiente de nuestras fuerzas armadas. Nos aseguraremos de que nuestras fuerzas armadas tengan acceso a capacidades de transporte estratégico y que la infraestructura está mejor protegida contra amenazas cibernéticas y otras amenazas híbridas. Y lo haremos con nuestros socios, incluida la OTAN”.

El comisario de Mercado Interior, Thierry Breton, coincide en que “la crisis en Ucrania “ha demostrado la importancia vital de garantizar una asistencia militar rápida”, y en que, “el Plan de Acción sobre Movilidad Militar 2.0 contribuirá en gran medida a la capacidad de nuestras Fuerzas Armadas para responder rápidamente a las crisis en el exterior de las fronteras de la UE y más allá”. Breton ha recordado que el Fondo Europeo de Defensa está financiando con 9 millones de euros un consorcio de empresas de nueve Estados miembros de la UE más Noruega para el desarrollo de un sistema digital de intercambio de información rápido y seguro relacionado con la movilidad militar.

Evaluación de la infraestructura actaul

También la comisaria de Transportes, Adina Vălean, ha puesto el acento en que la “agresión militar de Rusia contra Ucrania ha confirmado que debemos seguir mejorando la capacidad de la infraestructura de transporte, como carreteras, puentes y vías férreas, permitiendo que nuestras fuerzas armadas y su equipamiento se desplacen por la UE con facilidad”. La titular de transportes ha añadido que Europa ya está cofinanciando proyectos de infraestructura de transporte de doble uso a través del denominado Mecanismo Conectar Europa, con un presupuesto cuantificado en 1.690 millones de euros para el periodo comprendido entre 2021 y 2027.

“Bajo el nuevo Plan de Acción”, ha concluido, “evaluaremos hasta qué punto la infraestructura de transporte físico actual cumple con los requisitos militares y cuáles son las brechas actuales. Los hallazgos nos ayudarán a priorizar la infraestructura para el desarrollo y asignar fondos a nivel de la UE de manera adecuada”.