Las armadas de Perú y EEUU concluyen el planeamiento del ejercicio Siforex 2023

Las delegaciones de la Armada de Estados Unidos y la Marina de Guerra del Perú han finalizado la conferencia final de planificación del ejercicio de guerra antisubmarina y antisuperficie Siforex XIII - 2023 (Silent Forces Exercise, Ejercicio Fuerzas Silentes). La conferencia se llevó a cabo el 13 de septiembre en las instalaciones de la Comandancia de la Fuerza de Submarinos del Perú (Callao).

Siforex es un ejercicio que se desarrolla anualmente con el objetivo de fortalecer las capacidades de las Armadas participantes en materia de guerra antisubmarina y antisuperficie. También persigue incrementar la interoperabilidad, la cooperación y robustecer el entrenamiento de las tripulaciones. Los protagonistas del ejercicio han sido la Marina de Guerra del Perú (anfitrión); y la Armada de Estados Unidos, institución a la que le interesa preservar y mejorar las habilidades de sus tripulaciones para hacer frente a los silenciosos submarinos de propulsión diésel-eléctrica.

Siforex XIII 2023

En esta ocasión, las conferencias de planeamiento de Siforex XIII - 2023 han sido lideradas por el comandante del Escuadrón de Submarinos de la Armada del Perú, capitán de navío Edgar Moreno Cedamanos. Se ha contado con la participación de oficiales de la Comandancia del Escuadrón de Destructores N° 40 y de la Jefatura de Operaciones de la Comandancia de la Fuerza de Submarinos del Atlántico de la Armada de Estados Unidos. El comandante de la Fuerza de Submarinos del Perú, contralmirante Fernando Castillo Heredia también estuvo presente en el evento.

Cabe indicar que el 22 de mayo pasado, la Comandancia de la Fuerza de Submarinos celebró su 40 aniversario. Sin embargo, la tradición submarinista en Perú data desde el 19 de agosto de 1911, fecha en la que se recepcionó a los sumergibles Ferré y Palacios en los astilleros franceses Scheneider du Chalons y Sur Saone. Además, también cuenta un primer acercamiento a la tecnología de submarinos en Perú en 1879, cuando el ingeniero Federico Blume realizó pruebas exitosas con un sumergible de diseño propio que finalmente no pudo ser utilizado en la Guerra del Guano y Salitre, y tuvo que ser hundido en enero de 1881.