EEUU dona dos lanchas Tempest 44-FCI a Guardacostas de Costa Rica

Estados Unidos reforzó al Servicio Nacional de Guardacostas de Costa Rica con embarcaciones y la construcción de instalaciones de capacitación y mantenimiento por un valor de inversión de casi cuatro millones de dólares. La donación consta de dos botes interceptores nuevos Tampa Yacht Tempest 44-FCI y dos embarcaciones del constructor naval colombiano Eduardoño, que fueron reparados, todo por un valor de 2,3 millones de dólares. Además, Estados Unidos dotarán a los guardacostas costarricenses de un nuevo centro de capacitación y mantenimiento en Puerto Caldera, en la provincia de Puntarenas, en el Pacífico de Costa Rica.

Dias antes de la donación, las autoridades de Seguridad Pública de Costa Rica y de la Embajada de Estados Unidos colocaron la primera piedra de las instalaciones, que comenzarán a edificarse en la segunda mitad del año.

El proyecto, que implica una inversión de 1,5 millones de dólares, se ejecutará en un área de 7.000 metros cuadrados y constará de un hangar de mantenimiento y reparación de embarcaciones y de doce aulas para capacitación y profesionalización de oficiales.

El Centro de Capacitación y Mantenimiento en la Estación de Guardacostas de Puerto Caldera permitirá a oficiales de esta dependencia formarse en reparación de embarcaciones utilizadas en la vigilancia de las aguas costarricenses.

Cooperación de EEUU

El ministro de Seguridad Pública de Costa Rica, Michael Soto, agradeció el aporte efectuado por las autoridades de Estados Unidos a la vez que resaltó la importancia de este nuevo equipamiento y capacitación para fortalecer al Guardacostas en la lucha contra el crimen organizado, la protección de la vida humana en operaciones de búsqueda y rescate y en labores de conservación de la biodiversidad marina.

Por su parte, la encargada de negocios de la Embajada de Estados Unidos en Costa Rica, Gloria Berbena, resaltó la importancia de la donación de las embarcaciones y la inauguración del centro de mantenimiento para pequeñas embarcaciones. “Costa Rica es un aliado clave en los operativos marítimos de interdicción contra narcotraficantes en aguas costarricenses. Esperamos continuar nuestra colaboración, para fortalecer las capacidades del Servicio Nacional de Guardacostas y tener una Costa Rica y una región más segura”, dijo Berbena.

Los Tempest 44-FCI están equipados con tres motores fuera de borda y cuentan con un equipo de comunicación moderno, que incluye radares e intercomunicadores, entre otras características.

Además, Estados Unidos remozó dos de cuatro embarcaciones Eduardoño que fueron adquiridas por el Servicio Nacional de Guardacostas en 2010 y en los próximos meses serán renovadas las restantes, lo que permitirá la capacidad operativa de estas unidades.