La Fuerza Aérea Uruguaya ha establecido el 17 de marzo de 2017, como la fecha definitiva para la desprogramación del sistema de aviones de ataque ligero FMA IA-58 Pucará, coincidiendo con la celebración de un nuevo aniversario de la aviación militar del Uruguay.
La decisión, que dejaría a uno de los dos escuadrones de Combate de la Fuerza Aérea sin aeronaves, el Nº 1 (Ataque), y con una sombría perspectiva en cuanto a reemplazos, llega luego de años de dificultades extremas para mantener operativas a las aeronaves pues sus motores franceses Turbomeca Astazou hace años que no se fabrican y la escasez de repuestos es prácticamente total.
Mientras que el usuario original y fabricante de la aeronave, Argentina, aún sigue luchando para mantener operativas algunas unidades e inclusive ha intentado remotorizarlas en un esfuerzo conjunto con IAI de Israel y motores P&W PT6, lo cierto es que estos proyectos se tornan inviables por la complejidad de la modificación pues los Pucará fueron fabricados de forma cuasi artesanal y no se puede estandarizar el proceso de recambio de motores, sumado a lo excesivo de los costos de la operación.
Recientemente, una comitiva argentina viajó a Francia donde fueron recibidos por la compañía Safran (compañía madre de Turbomeca) donde se les presentó la oportunidad de vender el stock de repuestos y motores que la fábrica aún tiene. Si bien la oferta fue bien recibida por Argentina, la escasez de recursos sumado a que aviónica debe ser actualizada y las células también precisan trabajos de recuperación, tornan inviable el mantenimiento operativo de este noble avión.
Sin reemplazo a la vista
Ante este panorama desolador, el mando de la Fuerza Aérea Uruguaya ha decidido que a no ser que aparezca una solución inmediata y milagrosa para recuperar estas aeronaves, deberán ser desprogramadas el próximo año y aunque la lógica indique que deberían ser reemplazadas, habrá que esperar a ver que decide el poder político al respecto.
La Fuerza Aérea Uruguaya llegó a tener seis unidades compradas a Argentina, perdiendo una en un accidente y obteniendo posteriormente otra célula para reemplazar la perdida desde stocks argentinos, así como repuestos y células en desuso desde Colombia, para recuperar la operatividad de algunas que estaban fuera de servicio. Al día de hoy apenas un sólo IA-58 Pucará se encuentra en vuelo, lo cual es un ejemplo claro de la crítica situación tanto del `Escuadrón Aéreo Nº 1´ como de la Fuerza Aérea en general.
Los IA-58 Pucará fueron fabricados por la antigua Fábrica Militar de Aviones (FMA), actual Fábrica Argentina de Aviones "Brigadier San Martín´ S.A. (FAdeA), ubicada en Córdoba.
Foto: Fuerza Aérea Uruguaya