El octavo avión de vigilancia de medio alcance Ocean Sentry (Centinela del Océano) de la versión HC-144B ya equipa al Servicio de Guardacostas de Estados Unidos (USCG). El programa Ocean Sentry Refresh (Actualización del Centinela del Océano) espera haber completado en 2022 la modernización de los 18 aviones HC-144 que el servicio adquirió a Airbus. Las mejoras incluyen el sistema de misión Minotauro.
Los HC-144 se basan en el modelo CN-235 de la empresa europea, que es de diseño español (desarrollado por la antigua firma nacional CASA, integrada ahora en Airbus). Las aeronaves estadounidenses están equipadas con sistemas de mando, control, comunicaciones, computación, inteligencia, vigilancia y reconocimiento (sistemas comúnmente aglutinados bajo las siglas en inglés C4ISR) para desarrollar su misión, y, entre otras ventajas, consume una baja tasa de combustible y es capaz de despegar y aterrizar en pistas cortas. Los aparatos fueron adquiridos con la inclusión de un radar de búsqueda, cámaras infrarrojas y electroópticas, un sistema de identificación automática para la recogida de datos de los buques en el mar, y un equipo de comunicaciones.
Las mejoras que se están introduciendo ahora en los aparatos en el Centro de Logística de Aviación, en Carolina del Norte, incluyen un nuevo sistema de gestión de vuelo, con el que mejora el control de las comunicaciones, la navegación y la supervisión de los equipos. El sistema Minotauro, que ahora equipa los aviones, integra los sensores y el radar de las aeronaves, proporciona una afusión de datos notablemente mejorada y capacidades de procesamiento e intercambio de información, según ha recogido Naval News.
Cada avión que se entrega con estos cambios (el noveno está previsto para finales de noviembre) cambia su antigua denominación HC-144A por la nueva HC-144B, que hace eferencia a la introducción de estas mejoras.
Al igual que los CN-235 en el que están basados, los Ocean Sentry cuentan con una rampa trasera que facilita la carga y descarga de sistemas de misión paletizados de la Guardia Costera. La cabina se puede despejar para aumentar su capacidad de carga y para realizar misiones de evacuación médica. Además, la rampa trasera está diseñada para que se pueda abrir en vuelo y despliega equipos de búsqueda y rescate.