El primer buque multipropósito del proyecto Escotillón IV Fase I de la Armada de Chile registró un importante hito esta semana al alcanzar un 25% de avance en la grada de construcción de la planta industrial Talcahuano de Astilleros y Maestranzas de la Armada (Asmar).
Según la Armada de Chile, este estado de avance se alcanzó en línea con lo planificado y con un nuevo bloque en la grada, el montaje de cuatro nuevos generadores y la próxima instalación de los motores principales.
La institución y Asmar, como publicó Infodefensa.com, firmaron el 31 de agosto del 2022 el contrato de construcción de dos buques multipropósito del proyecto Escotillón IV Fase 1 por una suma de 409,9 millones de dólares y con un plazo de ejecución de 100 meses. A partir de esa fecha, comenzó el proceso de adquisición de los equipos, materiales e insumos.
La construcción de las dos primeras unidades, de un total de cuatro proyectadas, permitirán a la institución incorporar una nueva generación de buques que modernizarán y mejorarán las capacidades de despliegue del Comando Anfibio y de Transportes Navales (Comanfitran) tanto en operaciones militares como humanitarias.
Los buques podrán operar en todo el Pacífico y tendrán capacidades y estándares para navegar en aguas antárticas durante los meses de verano, efectuarán operaciones que incluyen apoyo logístico, misiones de búsqueda y rescate (SAR), movimiento y despliegue de tropas y material, y asistencia humanitaria y respuesta a desastres (HADR).
Un motor para el desarrollo económico nacional
El director de Asmar, contraalmirante Jaime Sotomayor, destacó este avance en la construcción del primer buque multipropósito en el marco del Plan Nacional Continuo de Construcción Naval. El proyecto Escotillón IV logró otro hito recientemente con la firma del acuerdo público-privado de Asmar con Astilleros y Servicios Navales (Asenav) para la construcción de las embarcaciones de desembarco de estos buques.
El contraalmirante Sotomayor señaló que el avance en el primer buque multipropósito es “un importante paso para el proyecto Escotillón IV, que al igual que los futuros proyectos de construcción naval chilena, buscan actuar como un motor que tracte la industria manufacturera local e impulse el desarrollo económico nacional”.
La construcción del primer buque multipropósito cuenta con 44 bloques en total, cuya fabricación requiere de un alto grado de tecnología y automatización, tanto en su operación como en sus sistemas de control de averías, análisis de data, propulsión, entre otros, lo que desafía al astillero a un mayor desarrollo interno, equipamiento e innovación.
El administrador de Asmar Talcahuano, capitán de navío Rafael Castillo, destacó la labor de cerca de 600 colaboradores del astillero, “quienes en su mayoría pertenecen al área de construcción naval y que son los encargados de la materialización de este proyecto, cuyo resultado final -en su primera fase- se proyecta para el año 2028, con el primero de los cuatro buques anfibios”.
Características y capacidades
La Dirección de Programas, Investigación y Desarrollo de la Armada (Diprida) y Asmar firmaron en junio de 2020 un contrato para elaborar un diseño básico para la construcción de buques de transporte anfibio el que fue adjudicado a la empresa canadiense Vard Marine. El proyecto Escotillón IV se inició simbólicamente el 27 de febrero del 2022 con el corte de una bagra, elemento estructural longitudinal paralelo a la quilla que refuerza el casco del buque, en la planta industrial Talcahuano de Asmar.
Los buques tendrán una eslora de 110 m, una manga de 21,8 m, un puntal de 13,8 m, un desplazamiento de 7.987 toneladas, propulsión diésel-eléctrica, potencia de propulsión de 11.200 kW y una potencia eléctrica de 6.000 kW. Alcanzarán una velocidad máxima de 17 nudos y económica de 12 nudos, una autonomía de 30 días, una distancia franqueable de 7.000 millas náuticas y tendrán una capacidad de operación de 187 días al año.
Estarán tripulados por 21 oficiales y 74 gente de mar y podrán transportar una fuerza embarcada integrada por un comandante, un staff de la Fuerza de Tarea Anfibia (FTA), un comandante de Batallón de Infantería de Marina (IM), 16 oficiales IM y 231 soldados IM. Dispondrán en la proa de dos estaciones de armas remotas (RWS) con cañón de 20 mm y en la popa dos RWS con ametralladora de 12,7 x 99 mm.
Contarán con una cubierta para transporte de material rodado y de contenedores, una enfermería con capacidad de apoyo sanitario, podrán operar helicópteros Airbus Cougar, Dauphin o Sikorsky Black Hawk, y vehiculos no tripulados de despegue y aterrizaje vertical (VTOL). Dispondrán de una embarcación orgánica que permitirá el desembarco de vehículos y carga en cualquier parte del territorio nacional.