Nuevo candidato para sustituir al entrenador avanzado F-5M del Ejército del Aire y del Espacio español. Turquía ha ofrecido a España el avión de entrenamiento Hurjet de la empresa Turkish Aerospace Industries (TAI) para reemplazar a los veteranos aviones del Ala 23 de Talavera la Real (Badajoz) empleados para el adiestramiento de los pilotos de caza. El Ministerio de Defensa español ha situado la retirada de este avión, en servicio desde hace más de medio siglo, en torno a 2030.
Las conversaciones están en una fase bastante avanzada. De hecho, el prototipo del Hurjet aterrizó en la base aérea de Torrejón (Madrid) el pasado domingo para una primera evaluación por parte del Ejército del Aire y del Espacio español. Una delegación española también tiene previsto visitar en las próximas semanas las instalaciones de TAI en Ankara.
Sobre la mesa estaría un acuerdo de intercambio de aeronaves o lo que es lo mismo un trueque. La oferta turca incluiría cambiar 24 Hurjet por seis A400M, según publican medios especializados turcos. La primera mención oficial al Hurjet como candidato al programa para sustituir el F-5 se produce hace apenas dos meses, en mayo, en una intervención del Ejército del Aire y del Espacio en un evento organizado por la Real Sociedad Aeronáutica británica.
Sin entrar en los requisitos operativos y necesidades técnicas, la operación sería positiva a priori desde un punto de vista comercial para ambas partes. Del lado español, el Ejército del Aire y del Espacio tendría sustituto para sus F-5 y el Ministerio de Defensa colocaría una parte de sus A400M que no operará, mientras que Turquía lograría un cliente internacional de prestigio para su entrenador y además incrementaría su flota de A400M, algo que persigue desde hace tiempo, pero que no ha podido hacer por la falta de fondos.
Otras opciones que estudia España
La opción de un trueque para reemplazar los F-5 no es nueva. España y Corea del Sur tuvieron contactos en 2019 para un acuerdo de intercambio de A400M por aviones de entrenamiento T-50 de KAI. Si bien, al final la operación no salió adelante.
Además del Hurjet turco, en la terna de candidatos a sustituir el F-5 también están el T-7 de la estadounidense Boeing, el M-346 de la italiana Leonardo y el también citado T-50 de la coreana KAI. En 2020, Airbus ofreció el desarrollo de un entrenador avanzado español, el AFJT, no obstante, el proyecto al final quedó aparcado por la falta de financiación en España y el escaso interés de otros posibles socios como Francia o Alemania.
Tras dejar a un lado este proyecto, Airbus cerró el año pasado un acuerdo con Leonardo para unir fuerzas y buscar juntos oportunidades comerciales en el área del entrenamiento avanzado aprovechando la experiencia del M-346, un avión al que el fabricante italiano ha incorporado recientemente mejoras. Hace cuatro años, un estudio llevado a cabo por el Centro Universitario de la Defensa de San Javier (Murcia) concluyó que el M-346 era la mejor opción para reemplazar a los vetustos cazas F-5, tras analizar algunas de las diferentes opciones que existen en el mercado.
España quiere colocar diez A400M
España, hay que recordar, encargó al inicio del programa multinacional 27 aviones A400M, pero en 2013 anunció que solo operaría 14 aparatos y trataría de vender en el mercado de exportación los 13 restantes.
El Ejército del Aire y del Espacio ya tiene 14 aviones en servicio en el Ala 31 de la base aérea de Zaragoza. El último llegó hace poco más de un año. La ministra de Defensa, Margarita Robles, dio a conocer en mayo de 2023 que España tiene la intención de quedarse con otros tres más hasta alcanzar una flota de 17 aviones de transporte de este modelo. Por lo tanto, al final serían diez los A400M en venta.
Actualización del F-5M
Hace un año, en septiembre de 2023, el Ejército del Aire y del Espacio adjudicó a la empresa israelí IAI -a través de su representante en España Silon Aviación- un acuerdo marco valorado en 40 millones de euros para la actualización de la flota de 19 cazas F-5M todavía operativa.
La firma israelí IAI, especialista en este tipo de programas, ya realizó a principios de los 2.000 una primera modernización de esta flota. Ahora, la compañía efectuará diversas actualizaciones en el software y también trabajos de mantenimiento de los equipos instalados hace 20 años.
El programa tiene un techo de gasto de 40 millones de euros, aunque es muy probable que al final los trabajos no alcance ese valor. El programa tiene como objetivo una “cura de obsolescencias de aviónica” para extender la vida del avión hasta 2030, según la resolución a la que tuvo acceso Infodefensa.com. La actualización de los componentes de la aviónica se efectuará en un plazo de tres años. Todos los cazas deberán contar con las mejoras previstas en noviembre de 2026, de acuerdo con los plazos de ejecución fijados por el Ejército del Aire y del Espacio.