Proyección y capacidades del Grupo Wagner

El empleo de mercenarios o "contratistas de seguridad privada" ofrece una serie de ventajas a los países que solicitan sus servicios, principalmente: 

a) La dificultad de relacionar a un país con las acciones cometidas por estos contratistas

b) El coste de contratación de estos servicios es significativamente inferior que el coste de enviar tropas nacionales a suelo extranjero y mantenerlas. 

El caso del Grupo Wagner tiene dos peculiaridades en ambos casos;

En el primer caso, se le relaciona directamente con un único país: Rusia. Al Grupo Wagner se le identifica como una fuerza de guerra hibrida de la Federación Rusa, dependiente del Ministerio de Defensa ruso. Desde su aparición en 2014 en el marco de la guerra del Dombás, se le atribuyen acciones que únicamente benefician a los intereses geopolíticos del Gobierno ruso por todo el mundo. 

Además, el armamento que utiliza es ruso y las instalaciones donde se entrenan en Rusia, pertenecen al Ministerio de Defensa ruso. Su creación está vinculada al entorno del gobierno ruso y de Vladimir Putin. Sus fundadores eran hombres cercanos al Kremlin y al propio Putin: 

I. Yevgueni Prigozhin (fallecido en 2023) fue propietario de restaurantes y empresas de catering (Holding Concord Management and Consulting) que ofrecían banquetes en el Kremlin.

El propio Prigozhin reconoció que Wagner trabajaba como un tentáculo más del ejército y la inteligencia rusa. También se le ha grabado en distintas reuniones en el Kremlin con otros generales de las fuerzas rusas y el propio Vladimir Putin.

II. Dmitri Utkin (fallecido en 2023) fue Spetsnaz GRU y fundó una empresa de seguridad privada dedicada a la lucha contra la piratería en el golfo de Adén y la protección de pozos petrolíferos e infraestructuras en Siria, el Cuerpo Eslavo (Slavonic Corps), creada en Hong Kong en 2013 por dos empleados de otro ejército ruso privado: el Moran Security Group. De esta manera Wagner no es el primer ni único grupo de mercenarios ruso.

Paradójicamente, el gobierno ruso prohíbe el uso de ejércitos privados (artículo 359 del Código Penal ruso) y no reconoce al Grupo Wagner (aunque en la práctica esto no se aplica), el cual no está registrado legalmente en el país. No hay que olvidar que el antiguo KGB era especialista en operaciones de distracción y engaño, por lo que las contradicciones que puede tener el gobierno ruso con respecto al Grupo Wagner no hacen sino jugar a favor de la negación plausible. Actualmente en el marco de la guerra de Ucrania el gobierno ruso reconoce la existencia de grupos paramilitares como “destacamentos de voluntarios”, permitiendo a Wagner tener su propia sede oficial en 2022, en San Petersburgo.

La estructura de Wagner es compleja y se divide entre una red de distintas empresas con distinto propósito, siendo difícil aplicar sanciones desde Occidente. Las empresas de seguridad rusas se registran como empresas comerciales, aunque su actividad real sea totalmente distinta.

Estos hechos, nos podrían mostrar que todo obedece a una estrategia por parte del Departamento Central de Inteligencia ruso (GRU), donde crear una fuerza de esta envergadura para llevar a cabo diversos cometidos (que veremos a continuación), en favor de los intereses rusos, les brindaría no solo una cortina de humo que permitiría la negación plausible de la participación de Rusia en diversos conflictos, sino también le permite al gobierno ruso ocultar cifras de bajas y costes financieros de las operaciones. 

En el segundo caso, la financiación del grupo Wagner proviene de varias vías:

1) Gracias a la existencia de un entramado de empresas de apoyo, el Grupo Wagner se ha beneficiado de infraestructuras, servicios jurídicos, y contratos de explotación de recursos naturales o servicios financieros. El entramado de Prigozhin funciona firmando acuerdos de seguridad y cooperación con los países donde Wagner se despliega a cambio no solo del pago de sus servicios sino también de llevarse un porcentaje de los beneficios de explotación de aquellos yacimientos que protege o recupera. 

Es frecuente qué en países africanos, el Grupo Wagner firme acuerdos similares, donde se intercambian servicios (adiestramiento de tropas locales, seguridad, protección de infraestructuras y personas, etc) a cambio de los derechos de explotación de recursos naturales (en un porcentaje o en exclusiva). Los beneficios se comparten con el gobierno ruso que es el principal beneficiario. También se ha demostrado el contrabando de minerales y diamantes. 

También realiza prospecciones mineras para evaluar el potencial económico y la viabilidad de explotación de otros recursos. La maquinaria pesada y logística viene de Rusia.

De esta manera, tenemos un conglomerado de empresas mineras rusas operando en distintos países africanos, con el objetivo de explotar los recursos y enviarlos a Rusia; Bois Rouge, Lobaye Invest, Sewa Security Forces y Midas Ressources en República Centroafricana (Diamantes); Kraomita Malagasy y Kraoma Mining en Madagascar (Cromo); y Esnaad Engineering y Meroe Gold en Sudán (Oro), son algunos ejemplos.

En algunos casos, las concesiones de explotación vienen determinadas por la imposibilidad del país deudor de pagar los servicios a los contratistas de otra manera. (Como el caso de Mali). 

Aunque Prigozhin haya muerto, las empresas del oligarca se mantienen sin cambios, puesto que suponen una herramienta crucial para el desarrollo de las operaciones rusas en África, lo que da otro argumento más para identificar al Grupo Wagner como fuerza dependiente del gobierno ruso. 

2) Otro método de obtención de beneficios es la venta de armas, tradicionalmente Rusia siempre ha sido un importante proveedor de armas mundial, siendo el principal proveedor de armas de África. 

El grupo Wagner ha ayudado a algunos ejércitos nacionales a adquirir armamento y tecnología como el caso del ejercito Libio al cual ha suministrado misiles SA-22 , GAZ Tigr IMV, Typhoon MRAP y minas terrestres. 

3) Por otro lado, la financiación por parte del Gobierno ruso (reconocida por el propio Putin) se ha incrementado sustancialmente en los últimos cinco años. Según fuentes, en 2017 la financiación dada por el gobierno ruso ascendía a 3.1 millones de dólares, y actualmente se estima en aproximadamente 1.014.millones de dólares, un incremento exponencial que vendría explicado por la participación del Grupo Wagner en la guerra de Ucrania.

La financiación saldría de las partidas del presupuesto estatal destinadas al Ministerio de Defensa, quien sería el pagador. Además, se conoce que el Holding Concord Management and Consulting es proveedor de alimentos del ejército ruso. 

Capacidades

▪ PSYOPS

Entre sus objetivos se identifica: 

1) Crítica a la oposición rusa 

2) Critica a la política exterior de Occidente y Ucrania

3) Ensalzamiento y defensa de Vladimir Putin y las políticas de Rusia

4) Ensalzamiento y defensa de aliados de Rusia como Bashar al-Assad 

5) Interferencia en debates y sucesos sensibles de Occidente con el fin de desestabilizar 

6) Erosionar la confianza en las instituciones políticas y mediáticas occidentales y dañar su imagen

7) Apoyar discursos antisistema en redes sociales

8) Apoyar la narrativa de otras fuerzas de poder blando rusas como RT, Sputnik, bloggers o influencers.

▪ Operaciones convencionales

Siendo estas: 

- Adiestramiento de tropas locales

- Seguridad de infraestructuras

- Combate contra milicias terroristas y grupos rebeldes

- Protección de personalidades

- Asesoramiento militar

- Fuerzas de choque en conflictos de alta intensidad 

▪ BlackOps

Siendo estas: 

- Sabotajes

- Operaciones de falsa bandera

- Asesinatos 

▪ INTEL. 

Entre sus funciones se identifica:

- Construcción de redes de inteligencia e informantes en zonas de despliegue

- Apoyo a labores diplomáticas

- Recopilación de inteligencia centrada en competencia y amenazas

- Contrainteligencia

- Espionaje 

- Reconocimiento y empleo de medios satelitales 

Proyección

La Federación Rusa se ha adaptado a los nuevos marcos de la guerra hibrida que existen en la actualidad. Tras la Guerra Fría, el abandono del comunismo y la implantación del sistema capitalista en Rusia ha cambiado la manera en que el país proyecta su influencia y dominio sobre otros países. 

El grupo Wagner es un actor fundamental en esta estrategia, siendo una herramienta al servicio de los intereses geoestratégicos rusos para proyectar la presencia rusa en el extranjero, permitiendo a Rusia influir en los gobiernos de multitud de países subdesarrollados, explotar sus recursos, obtener inteligencia y debilitar la presencia occidental en estas regiones. Todo ello bajo el paraguas de la negación plausible y sin necesitar de una intervención militar formal. Algunos autores denominan a este fenómeno: “wagnerismo”.

Entre los efectos que están beneficiando a Rusia se identifican:

1. Influir en la ONU y otras organizaciones supranacionales, mantener una presencia en instituciones clave para sus transacciones económicas globales.

La red de alianzas y acuerdos con distintos países africanos y de oriente, favorece los intereses de Rusia en los distintos organismos internacionales como la ONU, donde a menudo cuenta con los votos de estos países aliados. 

Actualmente Rusia participa en los siguientes organismos africanos: (a) la UA; (b) el Tratado de Libre Comercio Continental Africano (AfCFTA); y (c) el Banco Africano de Importación y Exportación (Afreksimbank); lo que permite alcanzar acuerdos comerciales, realizar inversiones y desarrollar infraestructuras en el continente africano con mayor facilidad. 2. A consecuencia de lo anterior, mejora de la imagen pública de Rusia en todos los países donde tiene presencia Wagner y en otros países no alineados que verían a Rusia como una potencia militar y una alternativa a las potencias occidentales. Esto sirve a Rusia como discurso para demostrar que no está aislada internacionalmente.

3. Empeoramiento de la imagen occidental. La mejora de la imagen de Rusia y su expansión por distintas regiones fuerza a las potencias occidentales a incurrir en discursos intimidatorios y amenazas contra los países que deciden alinearse con Rusia, lo que refuerza aún más su posición internacional, empeora la imagen occidental y favorece la narrativa de los discursos anticolonialistas y antioccidentales.4. Crear un sistema internacional alternativo al occidental, de carácter multipolar. La creación del bloque de los BRICS es un claro ejemplo de contrapoder a la hegemonía de Occidente en el mundo.

5. Dominar y establecer mercados económicos. Rusia no solo busca enriquecerse con la explotación de materias primas, sino también contrarrestar las sanciones económicas. Algunos de los recursos que explota actualmente en África son: petróleo, gas, uranio, cromo, bauxita, cobalto, café, maíz, algodón y cacao.

Controlar los recursos en aquellos países africanos donde tiene presencia, le permite bloquear su acceso a las potencias extranjeras, o tener la capacidad de influir en los precios de las materias. Esto, es una manera de "contrasancionar" a sus adversarios geopolíticos.