El Ministerio de Defensa español ha desplegado en Estonia un sistema de defensa aérea Nasams equipado con misiles Amraam del Ejército de Tierra.
El sistema llegó por barco a principios de esta semana al puerto estonio de Paldiski. Este despliegue fue anunciado por el Ministerio de Defensa estonio el pasado mes de febrero. La batería Nasams dotará al país báltico de capacidades de defensa aérea hasta la llegada de los sistemas de este tipo que comprará próximamente.
Esta nueva misión se enmarca dentro de un paquete de medidas adoptadas por los países de la OTAN para continuar reforzando la presencia militar en el flanco este aliado un año después del inicio de la invasión rusa de Ucrania.
La ministra de Defensa, Margarita Robles, explicó en una reciente intervención en el Congreso de los Diputados que el despliegue será de cuatro meses y la misión principal será la formación a los militares estonios en este tipo de sistemas. El país báltico tiene en marcha un programa para la adquisición de una batería propia y el objetivo es que estén preparados para su uso, detalló la ministra.
La batería española operará desde la base aérea de Ämari, donde España ya ha desplegado cazas dentro la Policía Aérea del Báltico. La unidad de defensa aérea quedará bajo el mando del comandante supremo aliado de la OTAN en Europa (Saceur).
El Ejército de Tierra cuenta desde mediados del año pasado con otro sistema Nasams en la vecina Letonia. Los dos sistemas estarán vinculados y formarán parte de la defensa aérea y antimisiles del flanco oriental de la OTAN.
Foto: Embajada España en Estonia
Sistema Nasams
El Nasams es un avanzado sistema de defensa aérea y antimisil, diseñado por las compañías Kongsberg y Raytheon, opera a media cota, a partir de 300 metros de altura, y cuenta con tres elementos principales: el misil, el radar y el lanzador.
El Nasams (siglas en inglés de Sistema de Misil Superficie Aire Avanzado Noruego) utiliza el misil Amraam 120 C5 del tipo 'dispara y olvida' capaz de abatir blancos a hasta 25 kilómetros y a una altitud de 10 kilómetros. Fabricado por Raytheon, tiene un peso de 157 kg, una longitud de 3,65 metros, diámetro de 178 mm y envergadura de 533 mm. El Amraam puede llegar a una velocidad de 2 Mach e incorpora un sistema de guiado semiactivo y una cabeza de guerra de hasta 35 kg.
Por su parte, el radar MPQ-64 Sentinel es el encargado de detectar e identificar los objetivos. Tiene un alcance de 75 kilómetros y puede manejar en tiempo real hasta 80 trazas de aeronaves. Completa el sistema el lanzador, con seis contenedores o tubos que permiten poner en el aire otros tantos misiles a la vez.
Toda la misión se coordina desde un puesto de mando, conocido como centro director de fuegos, altamente automatizado, donde un equipo de tres militares recibe la información del radar y vigila y controla el espacio aéreo asignado a la batería. El sistema puede reaccionar en poco tiempo a distintos tipos de amenazas desde una aeronave, hasta misiles de crucero o drones, y permite hacer fuego sin visión directa. Entre las características del Nasams destaca además que tiene la capacidad de hacer fuego sin visión directa. El Ejército de Tierra español sitúa el alcance efectivo del sistema entre los 7 y 10 kilómetros del objetivo a proteger.
Cuatro baterías Nasams
Con el despliegue en Letonia, el Ejército pasa a tener fuera de España dos de sus cuatro sistemas Nasams en servicio. En concreto, el Mando de Artillería Antiaérea (MAAA) tiene una batería en el Regimiento de Artillería Antiaérea nº 74 en Gran Canaria y las otras tres están encuadradas en el Regimiento de Artillería Antiaérea nº 73 de Cartagena. Las dos baterías desplegadas en Estonia y Letonia han salido de esta última unidad.
En el caso español, cada batería está formada por dos lanzadores, un radar y un centro director de fuegos. Las baterías pueden actuar también de forma coordinada y en red con otros sistemas de defensa aérea españoles y de otros países aliados. Una vez que la de Estonia esté plenamente operativa estará vinculada con la otra batería española en Letonia. Ambas formarán parte, a su vez, del escudo de defensa aérea y antimisil de la OTAN en el flanco oriental.