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Los tanques del Ejército Argentino: tradición, modernidad y búsqueda de un modelo propio
Hablar de la Caballería Argentina es recordar a aquellos hombres que formaron el país, desde los que defendieron el territorio en las invasiones inglesas, los que terminaron de construirlo con las campañas al desierto, hasta la caballería montada en los blindados de hoy día.
El arma cuenta con elementos de exploración, pero el eje de la caballería son sus blindados. Actualmente Argentina posee alrededor de 110 SK-105 Kürassier y 250 TAM (Tanque Argentino Mediano), que se encuentran en proceso de modernización. A su vez, las Divisiones Blindadas cuentan con un regimiento de infantería mecanizada equipado con vehículos de la familia TAM como el TAM VCTP.
SK-105 Kürassier
El SK-105 Kürassier lo diseñó la fábrica austriaca Steyr en 1967 como vehículo cazacarros y se incorporó al Ejército Argentino en 1981. Su ligero peso y su elevada velocidad lo hacen especialmente adecuado para el terreno montañoso, ya que tiene una capacidad mejorada para ascender respecto a los tanques pesados.
El Ministerio de Defensa comenzó a desarrollar el prototipo Patagón en 2003, un híbrido que utilizaba el chasis del Kürassier y las torres FL-12 de los AMX-13 retirados de servicio. El Patagón se terminó en 2005 y se completaron cuatro unidades, pero fue cancelado por cuestiones económicas.
El desarrollo de un tanque nacional y el nacimiento del TAM
En la década del ‘40 surgió la idea de construir un blindado nacional. El concepto culminó con el Nahuel DL-43, un tanque mediano con cañón de 75 mm, inspirado en el Sherman M4. Se produjeron 12 unidades, pero finalmente el proyecto sería descartado y los tanques sustituidos por el Sherman M4.
En la década del ‘60 se implementó un plan para la adquisición de equipamiento denominado Plan Europa, que buscaba tomar distancia de EEUU y adquirir material en el viejo continente. Entre otras cuestiones se apuntaba a reemplazar los Sherman M4 y Sherman Firefly por tanques más modernos. Finalmente, se compraron AMX-13, una solución intermedia al no cumplir con las expectativas del Ejército Argentino. Pero su adquisición introdujo la idea de la familia de blindados, que era un concepto que antes no se tenía.
El país continuó con la búsqueda, pero los tanques ofrecidos, como el Leopard 1, el AMX-30 o el M60 Patton, eran demasiado pesados, las autopistas y los puentes del país serían incapaces de resistir su peso. Una de las condiciones era que el tanque no debía superar las 30 toneladas.
Desde la Dirección de Arsenales, con la participación del cuerpo de caballería, llevaron adelante un estudio de factibilidad sobre la fabricación en el país de un tanque mediano con los requerimientos del EA. En 1973, el presidente Perón da el visto bueno para llevar adelante el proyecto, con la condición de que el tanque debía desfilar para el 9 de julio de 1976, fecha que ni el mismo Perón alcanzaría, ya que murió el 1 de julio de 1974.
Debido al poco tiempo disponible, y por no contar con facilidades industriales ni tecnológicas, se debía partir de algo preexistente. En 1974 se firmó un acuerdo con la alemana Thyssen–Henschel, que formaría a los ingenieros y técnicos argentinos en métodos de fabricación, control de calidad y mantenimiento, y proveería la tecnología y logística necesaria para la construcción del blindado partiendo de la base del Marder. De estos trabajos surgiría el TH-301, que contaba con un cañón de 105 mm.
Tras más de dos años de trabajos conjuntos en la localidad de Kassel (Alemania) y la introducción de alrededor de 1.500 modificaciones, surge el TAM, que por más de una década sería el mejor tanque de la región. En 1980 se crea la empresa Tamse (Tanque Argentino Mediano Sociedad del Estado) en Boulogne, provincia de Buenos Aires, para la producción en serie del tanque y sus variantes. A pesar de haber recibido pedidos de países como Arabia Saudita, Ecuador, Irán, Irak, Panamá o Perú, jamás se pudo concretar una venta al exterior.
Modernización
El TAM es el principal elemento blindado del EA, pero no deja de ser un tanque diseñado en la década del ‘70 y producido en la década del '80 y principio de los '90, por lo que era imperativo llevar adelante una modernización que lo trajera al siglo XXI.
En 2010 Argentina acuerda con un consorcio formado por Israel Military Industries (IAI) y las empresas Elbit y Tadiran adaptar 74 de estos tanques a la versión 2C, incorporando dispositivos electrónicos de origen israelí. El prototipo se presentó en 2013 y se aprobó en 2014.
En 2016 se presentó la versión IP, que agrega un sistema modular de protección envolvente que cubre la torreta, los costados y el frente de la batea. La falta de fondos impidió que estas versiones estuviesen definitivamente operativas. Con el estancamiento del proyecto y los avances tecnológicos no era conveniente la instalación de sistemas que habían sido discontinuados o habían quedado obsoletos.
Argentina e Israel acordaron a principios de 2021 retomar el proyecto de modernización del TAM en un proceso que llevaría entre cinco y siete años. Y en 2022 se firmó un acuerdo entre el EA, el Ministerio de Defensa y la empresa mendocina Impsa para la modernización de la torreta. En octubre pasado la empresa entregó la primera torreta para la modernización del prototipo.
Los principales objetivos de la modernización son el incremento de las probabilidades de supervivencia y la capacidad de respuesta ante las amenazas, el rastreo de blancos a 360°, así como la posibilidad de combatir tanto durante el día como por la noche. También se buscó mejorar el nivel de protección de los tripulantes; optimizar la precisión de tiro estático y en movimiento; priorizar la digitalización de los sistemas de control y tiro, y eliminar los antiguos sistemas hidráulicos de movimiento de la torre.
En mayo de este año se realizaron las pruebas de disparos y ajuste de los sistemas instalados del TAM en su versión TAM 2CA2, con el objetivo de comprobar la modernización que implica la integración de los nuevos sistemas. Luego se realizó la Evaluación Técnica Operacional (ETO) con el fin de observar que se cumplan los requerimientos operacionales fijados por el Ejército argentino. Los resultados del mismo fueron presentados en julio junto al segundo prototipo.
