Rheinmetall lleva a 450 kilómetros de Ucrania la producción de sus blindados Lynx

La fabricación de los primeros vehículos de combate de infantería Lynx, desarrollados por la firma alemana Rheinmetall, ya ha comenzado en Hungría, coincidiendo con el nuevo año. La denominada producción inicial de baja tasa (LRIP) del nuevo modelo acaba de arrancar en el país, primer cliente del blindado. Estos trabajos, conocidos como producción preserie, incluyen también la fabricación de la torreta de calibre medio Lance que equipará la nueva plataforma, “así como variantes adicionales del Lynx”, informa la empresa. Si no se producen contratiempos, la producción a tasa completa de los vehículos (FRP) se iniciará el próximo mes de julio.

En estos momentos, los responsables del programa están inmersos en la contratación de personal cualificado y la entrada de equipos técnicos para el centro de excelencia Lynx, de acuerdo con la fuente.

Hungría encargó a Rheinmetall en el verano de 2020 un lote de 218 vehículos de combate de infantería Lynx KF41, junto a nueve blindados de recuperación Buffalo, por 2.000 millones de euros. De este modo, el vecino de Ucrania se convirtió en el cliente de lanzamiento de la nueva plataforma.

El contrato incluye productos y servicios adicionales como simuladores, capacitación e instrucción, además de un suministro inicial de repuestos y soporte de mantenimiento, de acuerdo con el fabricante. Los IFV (siglas de vehículo de infantería en inglés) Lynx KF41, modelo presentado en la feria sectorial de París Eurosatory 2018, estarán equipados con la citada torreta Lance tripulada, dotada de un arma de 30 mm y que también está desarrollada por Rheinmetall.

La primera fase de producción contempla la construcción en Alemania de los primeros 46 vehículos IFV y de mando y control, así como nueve vehículos blindados Bergepanzer 3 Büffel de recuperación. Los restantes 172 (IFV y vehículos de apoyo de combate) son los que se fabrican en suelo húngaro, para lo que el gobierno del país y Rheinmetall acordaron en agosto de 2020 la creación de una empresa conjunta encargada de levantar la planta de producción. Está previsto que la primera de estas unidades se entregue en 2024. Además de los vehículos blindados de combate, el alcance del suministro incluye municiones y servicios logísticos, así como 16 camiones.

Complejo industrial Zalazone

Según afirmó el presidente de la junta ejecutivo de Rheinmetall, Armin Papperger, cuando se suscribió el contrato, esta compra “no solo coloca a Hungría a la vanguardia de la tecnología militar europea. Reafirma el compromiso del gobierno húngaro de ser un socio confiable y militarmente más eficaz de sus aliados de la OTAN, una política que sigue con energía sistemática”.

La fabricación de los primeros Lynx tiene lugar en Zalaegerszeg, al oeste del país, por lo que se encuentra a unos 450 kilómetros de la frontera con Ucrania. La nueva factoría forma forma parte del complejo industrial Zalazone. Rheinmetall precisa que abarca modernas líneas de montaje, un taller de pintura, sistemas logísticos internos y un almacén automatizado. También incluye un banco de pruebas de fuente de alimentación, una cámara EMC, una cámara climática, un campo de tiro subterráneo y una pista de pruebas. “Este centro de excelencia no solo contribuirá a mantener y expandir la capacidad de Hungría para desarrollar y producir vehículos de combate modernos, también fortalece la economía del país”, añade la fuente.

El 15 de octubre, Rheinmetall ya entregó el primer vehículo Lynx a las Fuerzas Armadas húngaras, con el que formará la columna vertebral del cuerpo de infantería mecanizado de país.