La Armada encarga a Nammo Palencia munición de los cañones Oerlikon y las torres remotas de sus buques

La compañía Nammo Palencia suministrará a la Armada munición de calibre medio (20 mm y 30 mm) utilizada por los cañones Oerlikon, instalados en diversos patrulleros, cazaminas, buques de asalto anfibio, buques de aprovisionamiento en combate y fragatas F-100, y por las nuevas estaciones de armas remotas Sentinel de Escribano, con las que han sido dotados los patrulleros de la clase Serviola.  

El presupuesto del contrato roza los dos millones (1.984.400 euros, impuestos incluidos). El contrato prevé la adquisición de 23.500 disparos, repartidos en dos lotes. El primero, con una partida de 458.000 euros, contempla la compra de 8.000 disparos de 20x128 mm TP-T (ejercicio trazadora) y el segundo, 13.000 disparos 30x173 mm TP-T Eslabonado MK-15 y otros 2.500 disparos 30x173 mm AE-I-T (alto explosivo incendiario) Eslabonado MK-15. El presupuesto de este último es de 1.526.000 euros. 

Respecto a la munición de 20 mm, la Armada detalla que los buques de la Fuerza Naval disponen, entre otro armamento, “de ametralladoras de 20 mm Oerlikon en sus versiones KAA (20x85mm) y KAB (20x120mm)”. Estas armas emplean, los disparos de 20x128 mm TP-T, munición de ejercicio que permite el adecuado adiestramiento de las dotaciones de los buques.  

Por otro lado, añade, los buques de la Armada van a ser dotados de sistemas de armas remotos (RWS) que serán “una valiosa herramienta de protección contra amenazas típicas de entornos asimétricos, en los que la corta distancia puede exponer a los buques a la acción de embarcaciones suicidas, asaltantes o incluso dotadas de misiles”. Y continúa: “Para alcanzar y mantener esta capacidad de protección, la Armada ha adquirido 44 torres de RWS entre las que se encuentran las de 30 mm que utilizan 30x173 mm AE-I-T y TP-T".  

La Armada adquirió a Escribano en 2021 cuatro torres remotas (RWS, por sus siglas en inglés) Sentinel de 30 mm para los cuatro patrulleros de la clase Serviola (Centinela, Serviola, Vigía y Atalaya) por un importe de 4,6 millones de euros. Estas torres tienen un cañón MK44 Bushmaster. 

La multinacional noruega Nammo, especializada en la producción de una amplia gama de municiones, gestiona la Fábrica de Armas de Palencia desde el año 2013. La planta palentina es uno de los principales proveedores de munición del Ministerio de Defensa. Esta compañía se hizo con el último contrato de munición de calibre medio de la Armada hace un año, como publicó Infodefensa.com. En aquella ocasión, la licitación incluía disparos de calibre 20 mm y también de 25 mm para las ametralladoras de los buques y también para las de los aviones de combate Harrier AV-8B+.   

La planta de Palencia también se ha adjudicado a finales de septiembre de este año un contrato del Ejército de Tierra para el suministro de munición de 35 mm para los cañones antiaéreos 35/90 de las unidades de artillería por 1,6 millones de euros. 

La Armada tiene abierto otro expediente para la adquisición de munición para los cañones navales principales de sus fragatas y buques de acción marítima con un presupuesto próximo también a los dos millones de euros.