El Ejército del Aire español está estudiando la posibilidad de sustituir su actual flota de cazas de combate F-18, en servicio en las bases aéreas de Zaragoza y Torrejón de Ardoz (Madrid), por un nuevo lote de aviones de combate formado por Eurofighter LTE (Long Term Evolution) y otro modelo de caza de quinta generación.
El Jefe del Estado Mayor del Aire (JEMA), general del aire Javier Salto, explica en una reciente entrevista en la revista RED que "el Ejército del Aire considera que la mejor solución a día de la fecha sería sustituir parte de los F-18 con la adquisición de Eurofighter de la versión más avanzada (LTE), mientras para el resto no descartamos la opción de adquirir bien más Eurofighter, bien otro modelo de caza de 5ª generación".
La flota de EF-18M -versión española del F-18- está compuesta en la actualidad por 52 cazas. El Ala 12 de Torrejón opera unos 36 aviones y el resto, otros 16, están en el Ala 15 de Zaragoza. Estos aviones serán dados de baja en torno a 2030, sin embargo, el general destaca que la decisión final "no deberá demorarse más de dos años".
Como publicó Infodefensa.com, Airbus ya ha ofrecido un lote de entre 20 y 30 Eurofighter LTE para sustituir toda esta flota. Si finalmente España apuesta por dos modelos en la pugna entrarían previsiblemente el F-18 Super Hornet de Boeing o el F-35 de Lockheed Martin. La elección de este último modelo abriría la puerta además a la adquisición de la versión naval, el F-35B, la única opción posible para sustituir a los Harrier de la Armada.
Lo que sí está claro es el relevo de los F-18 de la base aérea de Gando (Gran Canaria), con más horas de vuelo, adquiridos de segunda mano a la Marina estadounidense. El JEMA señala que "en este momento nuestra prioridad es garantizar el relevo de los F-18 más veteranos que actualmente tenemos desplegados en Canarias. La solución que contemplamos es la adquisición de nuevos Eurofighter".
Y específica: "Con ello, daríamos continuidad al conocimiento adquirido con este sistema y podríamos aprovechar sinergias en los ámbitos logístico y de sostenimiento. Todo ello, proporcionando apoyo a la industria aeroespacial nacional, que no hay que olvidar que es un motor de la actividad económica en España y que representa el 80 por 100 de la industria de defensa". El programa, bautizado como Halcón, implica la compra de unos 20 nuevos Eurofighter por unos 2.000 millones de euros. El contrato podría firmarse el próximo año, con el objetivo de que los primeros aviones estén en servicio a partir de 2025.
El general Salto además aborda el estado del programa para sustituir a los veteranos C-101 por PC-21 de la firma suiza Pilatus. A este respecto, detalla que "el programa se encuentra en una fase muy avanzada, si bien sus plazos se han visto afectados por la pandemia, lo que podría implicar que no podamos comenzar con este nuevo concepto en el curso 2021/2022 como teníamos planeado inicialmente".
Respecto a los cazas de entrenamiento avanzado F-5, que serán dados de baja alrededor de 2028, el JEMA insiste en que la Fuerza Aérea apuesta por el desarrollo de un entrenador nacional. "Si bien todavía faltan años para la entrada en servicio de los nuevos aviones, la decisión hay que tomarla en los próximos meses", afirma. El desarrollo de un nuevo entrenador avanzado por parte de la industria nacional, incide, "además de proporcionarnos el avión que necesitamos, redundaría en beneficio de la economía española con el desarrollo de un programa tecnológico aeronáutico".
En la entrevista, Salto recuerda que es necesario recuperar la capacidad de aerotransporte y de reabastecimiento estratégicos. "Para su misión y la de todas las Fuerzas Armadas, el Ejército del Aire necesita urgentemente aviones multipropósito de aerotransporte y rea-bastecimiento (Multi-Role Transport Tanker, MRTT)". En este punto, hay que recordar que el Gobierno se ha comprometido con Airbus a la compra de tres aviones de este modelo dentro de un acuerdo más amplio para reactivar el sector aeroespacial tras el Covid.
El JEMA también analiza el helicóptero NH90 y el RPAS Predator B, dos nuevos sistemas que entrarán en servicio en breve en la Fuerza Aérea. La llegada del primer NH90, prevista para este mes de septiembre, supone -resalta- "un salto cualitativo en el ámbito de los sistemas de ala rotatoria" y un esfuerzo en la modernización de la Maestranza Aérea de Madrid para garantizar su sostenimiento.
Sobre el Predator, el general subraya que es una solución interina hasta la entrada en servicio del Euromale. Los nuevos RPAS de General Atomics, continúa, ofrecen principalmente información de calidad y de forma inmediata. "Estas dos características se han convertido en prácticamente imprescindibles para ejercer el mando y control de las operaciones", añade.