Egipto, primer cliente internacional de los misiles VL MICA NG de MBDA

La Armada egipcia equipará sus corbetas con el sistema antiaéreo de misiles VL MICA de nueva generación (NG). El fabricante europeo de este arma, la compañía MBDA, ha anunciado el contrato destacando que se trata de la primera venta del nuevo sistema a un cliente internacional. El MICA NG es un misil antiaéreo concebido para ser lanzado desde aviones, vehículos terrestres o buques, como en este caso.

Se trata de un arma lanzada oficialmente el pasado octubre, y que está previsto que entre en servicio en 2026. En esa fecha los MICA NG deberán estar disponibles en los aviones de combate franceses Rafale, para lo que la Dirección General de Armamento (DGA) de Francia encargó su desarrollo en 2018.

El VL MICA NG se basa en la integración en el sistema VL MICA del señalado MICA NG concebido principalmente para equipar a los Rafale.

De acuerdo con el fabricante, el nuevo sistema “ofrece capacidades mejoradas para enfrentar objetivos atípicos (UAV, aviones pequeños), así como amenazas futuras caracterizadas por firmas de infrarrojos y radiofrecuencias cada vez más bajas”. Al mismo tiempo, sus desarrolladores no han descuidado la capacidad de interceptar objetivos convencionales a distancias más largas, como aviones, helicópteros, misiles de crucero y misiles antibuque.

El consejero delegado de MBDA, Eric Béranger, apunta que ya hay 15 fuerzas armadas en contar con sistemas de la familia VL MICA. Entre ellas ya se encontraban las egipcias, cuya Armada cuenta con esta solución en sus cuatro corbetas de la clase Gowind, adquiridas al fabricante francés Naval Group.

Radar AESA

Entre las mejoras que incluyen los MICA NG se encuentra un buscador infrarrojo dotado de un sensor de matriz que le proporciona una mayor sensibilidad. Además, su buscador de radiofrecuencia empleará un radar activo de barrido electrónico (AESA), lo que le permitirá desarrollar estrategias de detección inteligente.

Los nuevos misiles contarán además con una mayor cantidad de propelente que los actuales para aumentar “significativamente el alcance del misil”, ya que, dentro de una carcasa del mismo volumen dispondrá con más espacio por la reducción de los componentes electrónicos. Además dispondrá de un nuevo motor de doble pulso para dotarse de más energía al final de su vuelo e incrementar su maniobrabilidad y capacidad de interceptar objetivos a grandes distancias.

También incluirá dos nuevos sensores internos que permitirán controlar el estado del misil durante toda su vida útil, incluido su transporte y almacenamiento, de manera que se podrán reducir los requisitos y costes de mantenimiento.