Lurssen: la gran apuesta de los técnicos uruguayos para su ansiada OPV

Recientemente, la Armada Nacional Uruguaya confirmó por segunda vez que el elegido técnicamente por la fuerza para proveer tres naves de patrulla es el buque alemán Lurssen PV80, basado en el proyecto construido para la Armada de Brunei. El impecable e incuestionable proceso de selección, que fue abierto por la Armada Uruguaya a todo aquel que quisiese presentar un proyecto, basado en ciertos requerimientos técnicos, duró más de dos años en los que incluso se realizaron diversos viajes a astilleros en buena parte del mundo, análisis técnicos, determinación de capacidades de construcción, mantenimiento post venta y un sin fin de parámetros que generaron una cierta calificación asignada a los diferentes proyectos. En el primer análisis técnico se definió que el alemán Lurssen PV80 estaba primero, el también alemán Fassmer OPV80 segundo, el DCNS L'adroit (de la línea Gowind) francés tercero y en cuarto lugar, bastante rezagado, el CSOC P18N Chino. Luego de un segundo análisis y de algunas modificaciones presentadas por los oferentes, nuevamente el Lurssen PV80 obtuvo el primer lugar, el DCNS L'adroit subió al segundo, el Fassmer OPV 80 quedó tercero y en cuarto lugar se mantuvo el CSOC P18N.

Después de que se confirmara esta elección, surge naturalmente una pregunta: ¿Quién es Lurssen?

La familia Lurssen ha estado construyendo buques durante más de 140 años e indudablemente en el mercado naval internacional el nombre es muy conocido, tanto en el sector civil como en el militar. Sin embargo, el bajo perfil mediático de la empresa hace que términos generales su nombre no sea inmediatamente asociado con buques militares pese a que sus naves navegan nuestros mares asiduamente. Tanto es así, que basta ir a la vecina Argentina para encontrarse con las lanchas misilísticas TNC-45 provistas a la Armada de ese país en la década de los 70 o a Chile para ver las lanchas misilísticas Clase S-148 Tiger, diseñadas por Lurssen y construidas en Francia (por temas netamente políticos). En Colombia también han servido lanchas rápidas del mismo diseño alemán. Pero lo más sorprendente, y que en general fuera del circuito militar naval tradicional se desconoce, es que Lurssen es el principal proveedor de buques para la Armada Alemana con participación en todos los proyectos actuales de la fuerza naval germana, incluyendo los modelos F122, F123, F124, F125 y la futura Fragata Ligera Multi Rol.

La venta de sus OPV a Uruguay significaría, sin duda, la reapertura de un mercado en el que en la últimas décadas la empresa no ha tenido mucha presencia, fundamentalmente por haber orientado su estrategia comercial a Asia, pero que presenta nuevas oportunidades, sobre todo en el área de buques de patrulla, con varios países buscando opciones y otros en pleno proceso de construcción.

El buque que Lurssen ha decidido presentar a Uruguay es el mismo que opera actualmente la Armada de Brunei, con soporte logístico instalado en el país. Lurssen les ha vendido cuatro unidades (denominados localmente clase Durasallam), tres en formato corbeta y la cuarta con capacidades reducidas para ser utilizada como buque escuela. Esta nave, construida bajo estándares militares (compartimentación, sistemas recurrentes, CIC, sistema modular de construcción, etc.), presenta, como diferencias fundamentales con sus 'hermanas' de Brunei que, a pedido de la Armada de Uruguay, en primera instancia no contará con misiles, el cañón de proa será de 40mm en vez de los 57mm de Brunei y, en vez de tener un director de tiro dedicado, utilizará un sistema electro-óptico con capacidad de enlace al radar Terma para dirección de tiro.

A nivel de sistemas electrónicos, utilizará un radar de vigilancia Terma Scanter 4100 2D (superficie/aéreo), un sistema electro-óptico de vigilancia y, como director de tiro para la pieza Bofors, CIC con capacidad de hasta cuatro estaciones multifuncionales dobles y enlace mediante Data Link y sistema de comunicaciones seguras. El radar Terma y el sistema de enlace del buque permitirá ser compatible cien por cien con la futura red de radares terrestres de la Armada, generando así una sinergia entre todos los sistemas de detección para poder ofrecer la mayor cobertura posible del mar territorial.

Como medida de intercepción/interdicción rápida, posee una rampa trasera para el lanzamientos de botes inflables semirrígidos, con un sistema que modifica la turbulencia generada por los motores del buque para facilitar el despliegue/recuperación de botes semirrígidos y dos botes más (uno por banda) para despliegue rápido. La plataforma de helicópteros puede transportar toda la gama existente de aeronaves de alas rotatorias ligeras, medianas y pesadas de hasta 11,2 toneladas de peso.

Ahora bien, luego de destacadas las capacidades técnicas del buque que lo han puesto en primer lugar en los dos análisis sucesivos realizados por la Armada a pedido del Poder Ejecutivo, resta saber cuáles serán los pasos a seguir por el Gobierno para que se concrete la compra.

Considerando el factor financiero como clave para esta definición, la firma alemana ha incluido en su propuesta comercial un plan de financiación a muy largo plazo, con el apoyo del Gobierno alemán y a una tasa de interés preferencial.

Queda planteada la interrogante de qué es lo que el Gobierno decidirá y si el factor técnico/financiero será suficiente para superar a posibles presiones políticas que son comunes en estas licitaciones internacionales.

Se estima que durante el primer semestre de 2016 el Gobierno comunique cuál buque será el elegido.