Rosoboronexport ofrece el Yak-130 y un centro de mantenimiento a México

México carece de un reactor entrenador y Rusia tiene una propuesta: el Yak-130. Rosoboronexport, la oficina de ventas en el exterior de armamento del consorcio industrial ruso Rostec, ha estado en la Feria Aeroespacial México 2017 (Famex 2017), para presentar sus propuestas aeronáuticas para Latinoamérica. En su debut en México, una de las propuestas más interesantes de Rosoboronexport pasa precisamente por cubrir las carencias locales en adiestramiento de pilotos.

En este contexto, Infodefensa tuvo la oportunidad de charlar con el director de los Programas de Marketing para América de Rosoboronexport, Alexander V. Denisov. La conversación se centró en las necesidades de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM), y en su carencia de un reactor entrenador, ya que no posee ninguno desde 2007.

Aunque Rusia no es la única nación que puede ofrecer aeronaves que llenen éste vacío, sin duda es uno de las países con mayores posibilidades para hacerlo, a causa de la enorme capacidad de su industria aeronáutica y la indiscutible calidad de sus productos, al tratarse de aeronaves que discutirían fácilmente por el dominio de cualquier espacio aéreo y que en México podrían ofrecer una importante alternativa para mantener un núcleo de pilotos entrenados a bordo de reactores, una habilidad que ninguna fuerza aérea quiere perder.

Propuesta en marcha

Aunque los rusos no han querido realizar ninguna declaración al respecto, todo parece indicar que la propuesta del Yak-130 ya está sobre la mesa de la FAM. El segundo paso será cursar invitación a personal mexicano para realizar una visita a la fábrica del Yak-130 en Irkutsk, Siberia, para que conozcan la línea de producción de la aeronave e incluso sea evaluada.

El Yak-130 es un avión que se percibe como conveniente a las necesidades de la FAM y aunque es un entrenador avanzado, puede cumplir las funciones de un avión de primera línea. Aparte de que sus componentes son 100% rusos, lo que no compromete líneas de producción terciadas y que, por sus características, diseño y prestaciones, así como sus bajos costos de compra y uso, es una opción realista.

Sobre mantenimiento, una fase crítica en la operación de aeronaves, la empresa proporciona muchas iniciativas, pero como mínimo se ofrecen dos opciones a todos los clientes. La primera es la de mantenimiento por contrato, donde el cliente pide un cierto nivel de disponibilidad de su flota lo que significa una cierta cantidad anual de recursos, pero libera al comprador de los esfuerzos, herramientas o materiales; permitiéndole enfocarse en la operación de los aviones. La otra opción es calificar al personal del país cliente para que, con sus propios esfuerzos, mano de obra y a través de una línea de suministro directo a la casa productora, se lleven cabo los mantenimientos.

Un centro de mantenimiento para México

Al ser preguntado por el crecimiento de la industria aeronáutica en México, los rusos destacaron su disposición a explorar la instalación de una planta o centro de mantenimiento en México. Esta posibilidad garantizaría la cooperación a largo plazo y el intercambio de conocimientos y tecnología, aunque nada está definido aún.

Siguiendo en el plano de colaboración industrial, los integrantes del consorcio ruso también hicieron hincapié en la ventajas de la cooperación entre ambos países e incluso dejaron abierta la posibilidad de construir partes en México. En este sentido, es de recordar que el Gobierno ruso siempre ha dado muestras de apertura hacia México en temas industriales.

El Mig-35 para Latam

Como no podía ser de otra manera, la entrevista también tocó la posible venta en la región del Mig-35, avión que no solo ha causado un enorme revuelo en el medio aeronáutico local porque es un producto viable para México, sino en el regional porque también podría servir a muchas de las fuerzas aéreas de la zona Latam.