El Ministerio de Defensa de Guatemala confirmó la adquisición al consorcio Textron Aviation (pertenecente a los fabricantes Beechcraft y Cessna) de cuatro aviones para reforzar a su Fuerza Aérea. El monto de la inversión es de 60 millones de quetzales (8,2 millones de dólares).
Aunque la información oficial no es demasiado precisa, por un lado se habla de dos aeronaves turbohélice, monomotores, que probablemente se trate, por su precio de alrededor de 6,7 millones de dólares por ambos, del modelo Cessna 208 Caravan.
Según el portavoz del Ejército de Guatemala, coronel Óscar Pérez Figueroa, el par de aviones, que serán entregados en octubre próximo, se utilizarán para “misiones interinstitucionales” que significan recuperación de la defensa aérea, reconocimiento por aire en lugares de difícil acceso, así como detectar la presencia del crimen organizado y narcotráfico.
Agregó que las aeronaves tendrán la capacidad de recibir información que brindan los radares que están bajo el control de Defensa, los mismos, proveídos por la española Indra, que eran parte de un paquete más completo con seis aviones de ataque ligero Embraer EMB3124/A-29 Super Tucano, pero cuya compra fue cancelada por el expresidente Otto Pérez bajo el argumento que el fabricante brasileño los había sobrepreciado.
El vocero militar indicó que no se cuenta con este tipo de aviones, ya que los últimos (Fokker) tienen aproximadamente cinco años de estar en tierra. A ellos se suman los IAI Arava 201, que fueron vendidos por Israel a finales de 1978, los cuales también están inhabilitados.
Además de esas dos aeronaves, se habla de la adquisición de dos aviones más, por un monto de inversión de 1,5 millones de dólares por ambos, para ser destinados para entrenamiento de pilotos aviadores de la Escuela Militar de Aviación.
De forma general, se menciona que los cuatro aviones serían monomotores turbohélice, por lo que supondría que este par para instrucción pudiera ser del modelo Cessna Turbo Skyhawk JT-A.