Desde el gobierno del expresidente Ollanta Humala, entre 2011 y 2016, el Ministerio de Defensa del Perú ha emprendido un proceso de evaluación de potenciales reemplazos para su veterano inventario de vehículos blindados de transporte, habiendo comenzado por la compra de más de 300 camiones militares a la empresa alemana Rheinmetall MAN Military Vehicles para el Ejército del Perú, cuya propuesta se evaluó de mejor manera a aquella de Kamaz, así como la compra a General Dynamics Land Systems – Canada de 32 blindados LAV II 8x8 para la Marina de Guerra del Perú, tras haber intentado en repetidas oportunidades llevar a cabo el overhaul y modernización de los BMR-600 6x6.
Además de algunos blindados italianos en la Fuerza Aérea del Perú, el grueso del brazo de transporte blindado terrestre de las Fuerzas Armadas se ubica en el Ejército, que dispone de un variopinto inventario de vehículos Fiat OTO 6616 y 6614, BRDM-2, UR-416, algunos BTR-50, M-113, M-106 e incluso half-tracks que datan de la segunda guerra mundial, pero que aún se consideran prácticos para el desierto peruano. Todos los blindados citados se encuentran en estado de obsolescencia, a pesar de estudios llevados a cabo por especialistas militares para la modernización de algunos, por ejemplo, llevar el M-113A1 a la variante M-113A3, que a la fecha no se ha concretado. Todos los blindados citados, también presentan un blindaje muy delgado, que no ofrece protección mayor que repeler el impacto de municiones de pequeño calibre y las esquirlas de municiones algo superiores.
Cabe indicar sin embargo, que en los tiempos de su adquisición, representaban una fuerza disuasiva real y creíble, un valor que con el transcurrir de los años se ha perdido por completo, en desmedro de uno de los objetivos más importantes del Ejército, tener la capacidad efectiva para enfrentar en tierra aquellas amenazas internas y externas que se consideran más probables en el estudio de escenarios que los institutos armados evalúan de manera permanente. Asimismo anotar que el Ejército peruano fue pionero en la región, al integrar los blindados de defensa antiaérea Shilka.
En atención a tal realidad es que el Ejército del Perú ha iniciado estudios de requerimiento y las posibilidades que ofrece el mercado internacional para renovar su obsoleto parque blindado, habiendo concretado la gestión de los Proyectos de Inversión Pública (PIP) que la frondosa burocracia estatal peruana requiere para darle trámite a las adquisiciones relevantes de los institutos armados.
El 25 de abril de 2013 se conformó el PIP Mejoramiento de las capacidades del Sistema Blindado en el COS (Comando Operacional del Sur). A partir de ahí se evalúan no solamente los requerimientos para un nuevo tanque principal de combate, sino también para blindados con capacidad para acompañar a los tanques con una compañía de fusileros a bordo.
Para el Ejército del Perú el ofrecimiento del Ejército de Estados Unidos para la compra-venta de los LAV III 8x8 no representa la mejor opción, sino la segunda. El blindado oruga BMP-3, un producto de KBP Tula, está mejor considerado por su capacidad para brindar fuego de soporte, su mejor movilidad todoterreno (al utilizar orugas en lugar de neumáticos o llantas, que requieren mayor mantenimiento) aunque desarrollan menor velocidad en pista o terreno afirmado, con el bono de que el BMP-3 tiene además capacidad anfibia.
Cabe anotar que el LAV III / Stryker se le califica mejor que al BTR-80, cuyo diseño responde a conceptos operacionales más antiguos.
Listado de vehículos (Pinche sobre el nombre o la foto para acceder a la ficha del carro)