La agencia alemana de adquisiciones militares, conocida por las siglas BAAINBw, ha encargado el primer estudio de arquitectura del sistema para el futuro carro de combate franco-alemán a las compañías alemanas Rheinmetall y Krauss-Maffei-Wegmann (KMW) y la francesa Nexter. Estas dos últimas forman parte desde 2015 del consorcio KNDS, que en 2018 presentó su propuesta de carro de combate europeo EMBT (siglas de carro de combate principal europeo) como apuesta para el denominado programa de sistema de combate terrestre principal (conocido por las siglas MGCS). El MGCS es una iniciativa franco-alemana con el que ambos países “están enviando una fuerte señal de cooperación de defensa europea”, de acuerdo con la información facilitada sobre este contrato por el Ministerio de Defensa alemán, que ha actuado en esta adjudicación en nombre de los gobiernos de los dos países.
Después de que las ministras de Defensa de Alemania y Francia (Annegret Kramp-Karrembauer y Florence Parly, respectivamente) hayan firmado el marco y los acuerdos de implementación de este programa, el enfoque ahora pasa al contrato con los socios industriales Rheinmetall, Krauss-Maffei-Wegmann y Nexter. Este paso supone el lanzamiento del estudio de arquitectura del sistema para el MGCS.
La fuente oficial explica que los conceptos seleccionados a nivel nacional se están armonizando para desarrollar una arquitectura de sistema multiplataforma común. Está previsto que la primera parte del estudio se complete dentro de 20 meses.
El acuerdo implica también a Francia, que cofinancia el contrato junto a Alemania, y las empresas de ambos países “implementarán una división equitativa del trabajo”.
El ministerio alemán apunta que aunque, “dada la importancia del proyecto conjunto, una ceremonia festiva de firma habría sido lo más apropiado”, el marco actual de combate al Covid-19 no lo ha hecho posible. De ahí que se haya suscrito por correo. De este modo, la parte industrial (Rheinmetall, Krauss-Maffei-Wegmann y Nexter) ha sido la primera en firmar, y posteriormente, tras recibir los documentos, ha podido hacerlo la BAAINBw. El acuerdo franco-alemán recoge que únicamente resultaba necesario la firma de la parte germana para sacarlo adelante.
Está previsto que el desarrollo que salga de este programa sustituya al carro de combate Leopard 2 alemán y al Leclerc francés a partir de mediados de la década de 2030.