Lockheed Martin entrega a la Real Fuerza Aérea de Nueva Zelanda el primer C-130 J-30 Super Hercules

La empresa estadounidense Lockheed Martin ha entregado a la Real Fuerza Aérea de Nueva Zelanda (RNZAF) el primer C-130 J-30 Super Hercules de los cinco encargados por este país en 2020.

La ceremonia de entrega del avión a las autoridades del Ministerio de Defensa de Nueva Zelanda y de las Fuerzas de Defensa de Nueva Zelanda se celebró en las instalaciones que Lockheed Martin posee en la localidad de Marietta, situada en Georgia (EE.UU).

Las tripulaciones del Escuadrón 40 de la RNZAF, ubicado en la base aérea de  Whenuapai, a las afueras de Auckland, la segunda ciudad neozelandesa, serán las encargadas de operar los nuevos C-130 J-30.

A través del Programa Ventas Militares al Extranjero (FMS) de Estados Unidos, Nueva Zelanda anunció hace cuatro años la compra de cinco aviones de transporte táctico Super Hércules en su versión de fuselaje alargado, denominada C-130J-30. Su adquisición responde al necesario reemplazo de la flota de C-130H, que acumulan 60 años de servicio.

"Desde el apoyo a operaciones humanitarias y de socorro en casos de desastre hasta la asociación con aliados en operaciones militares, los C-130 de Nueva Zelanda son verdaderamente una fuerza global”, destacó en la ceremonia de entrega Rod McLean, vicepresidente y director general de la línea de negocios Air Mobility & Maritime Missions de Lockheed Martin.

“La nueva flota de C-130J de la RNZAF continuará apoyando estas misiones críticas mientras ofrece a Nueva Zelanda una mayor alineación aliada, más alcance, capacidades mejoradas y un rendimiento comprobado para algunos de los requisitos operativos de transporte aéreo táctico más exigentes”, añadió el directivo de Lockheed Martin.

El Super Hercules ofrece una mayor eficiencia en el consumo de combustible, lo que se traduce en una huella de carbono más reducida en comparación con otros aviones de transporte a reacción de tamaño mediano, afirma la compañía.