España acaba de asumir el mando de la operación Atalanta de la Unión Europea que lucha contra la piratería en el Cuerno de África. El contraalmirante español Manuel Alvargonzález Méndez pasa a dirigir la fuerza naval europea en un momento complejo marcado por el incremento de los ataques piratas a mercantes frente a las costas de Somalia y la inestabilidad al norte del área de influencia de la operación, en el estrecho de Adén, por las actuaciones de los hutíes de Yemen.
Los últimos meses, bajo el mando del contraalmirante italiano Francesco Saladino, los buques de la operación Atalanta, entre los que ha estado la fragata Canarias, han tenido que responder a las llamadas de varios mercantes atacados por piratas.
En la ceremonia de relevo, Saladino ha pedido a los barcos que navegan frente a la costa somalí que mantengan un alto estado de vigilancia a la luz de la reciente escalada de amenazas de piratería.
Por su parte, el contraalmirante Alvargonzález ha señalado que, "sin duda, Atalanta ha sido un éxito operativo". Ha añadido que asegura su "máximo esfuerzo para cumplir nuestras tareas principales, que son disuadir, prevenir y reprimir la piratería y robo a mano armada, protegiendo el Programa Mundial de Alimentos y otros envíos vulnerables al mismo tiempo".
Fragata Numancia
Alvargonzález liderará la operación Atalanta con la fragata Numancia como buque insignia de la misión. Además de sus capacidades orgánicas, la fragata cuenta con un Equipo Operativo de Seguridad (EOS) de Infantería de Marina, una Unidad Aérea Embarcada compuesta por un helicóptero SH60-F y un sistema UAV Scan Eagle de la Flotilla de Aeronaves de la Armada.
También dispone de un equipo médico-quirúrgico avanzado, capacitado para intervenciones quirúrgicas a bordo. La Numancia es la tercera de una serie de seis fragatas con base en Cádiz. Todas, dan continuidad a la ininterrumpida presencia de la Armada española en la operación Atalanta en aguas del mar Rojo y el océano Índico occidental.
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