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El 'boom' de la industria de defensa española en 2024: aumento de pedidos y reorganización del sector terrestre
La industria de defensa española ha empezado a recoger este 2024 los frutos de las nuevas inversiones del Ministerio de Defensa y del aumento presupuestario en la mayoría de los países europeos ante el incierto y complejo panorama geopolítico marcado por la guerra en Ucrania y las tensiones en Oriente Próximo. El año que está a punto de terminar ha sido positivo en líneas generales para el sector con un incremento de los pedidos y, por tanto, de actividad, en prácticamente todas las áreas.
En clave nacional, también destaca el proceso de reorganización del sector terrestre con la operación de Indra -con el visto bueno del Ministerio de Defensa- para tomar el control de Tess Defence, el consorcio que lidera el Vehículo de Combate sobre Ruedas (VCR) 8x8 Dragón y el Vehículo de Apoyo de Cadenas (VAC), dos programas claves para el futuro Ejército de Tierra.
El sector ha aprovechado los vientos de cola en Defensa para hacer caja. Las empresas especializadas en la fabricación de munición y armamento ligero son quizás el mejor ejemplo. Rheinmetall Expal Munitions, la marca española del gigante alemán, ha cerrado este año contratos valorados en casi 1.000 millones de euros solo en España, con el Ejército de Tierra como principal cliente. La compañía también trabaja en sus plantas españolas en la fabricación de munición -principalmente de 155 mm- para Ucrania y otros ejércitos.
Los nuevos pedidos también han llevado a empresas como Instalaza, FMG (Fábrica de Municiones de Granada) o Nammo Palencia a un incremento de la capacidad de producción para dar respuesta a la creciente demanda de munición.
La fotografía es muy similar en otras compañías. El fabricante de vehículos militares Santa Bárbara Sistemas -del grupo europeo GDELS- está enfocada en su planta de Trubia en el VCR 8x8 español y en la recta final del programa británico Ajax. De forma paralela, la compañía negocia un nuevo encargo de blindados Ascod con Letonia y ya piensa en el VAC español en fase todavía de ingeniería.
Escribano Mechanical & Engineering -ahora EM&E Group- se ha consolidado como un actor clave en la industria de defensa española. Este 2024, la compañía de los hermanos Ángel y Javier Escribano ha adquirido las firmas españolas Aunav y DAS Photonics, especializadas en robótica y fotónica, respectivamente, y ha impulsado su expansión más allá de su sede central en Alcalá de Henares con proyectos para abrir centros en Asturias y Madrid. Pero, sin duda, la operación más destacada de Escribano -y del sector en 2024- ha sido el incremento de su participación en Indra hasta el 14,3%.
Indra y el campeón nacional
La citada Indra presentó en abril un ambicioso plan estratégico para convertirse en el campeón nacional de defensa en España y ser un actor relevante en el nuevo tablero industrial europeo, en plena reconfiguración a raíz de la apuesta de la Unión Europea por el desarrollo de nuevas capacidades militares.
El primer movimiento relevante tuvo lugar en octubre. La compañía que dirige Marc Murtra anunció un acuerdo con GDELS-Santa Bárbara Sistemas, Sapa Placencia y Escribano Mechanical & Engineering para tomar el control de Tess Defence. Indra ha pasado a controlar la sociedad, con el 51% del accionariado. La operación busca una gobernanza más robusta y agilidad en la toma de decisiones en torno a un socio con la mayoría del capital y tiene además un componente estratégico que ha pasado en cierta medida desapercibido. Tess Defence se afianza como la gran apuesta de España para los programas de defensa terrestres.
En el sector naval, Navantia inició en las últimas semanas del año la construcción del BAM-IS y de los hidrográficos costeros para la Armada, junto con las nuevas corbetas para Arabia Saudí. Este 'boom' de la defensa también ha beneficiado a los astilleros privados que han cerrado en 2024 contratos de buques para la Armada y otras marinas como la de Uruguay o Suecia.
El 2024 ha sido más discreto en el sector aeroespacial de defensa. Desde el punto de vista industrial, la firma del contrato Halcón II en diciembre y la nueva línea de ensamblaje de dron Sirtap garantizan carga de trabajo para más de una década en la planta de Airbus en Getafe (Madrid), donde ya se fabrican los cazas Eurofighter de Halcón I para España.
Material para Ucrania
La industria de defensa española además ha comenzado este 2024 a producir material y equipamiento específicos para Ucrania, en virtud del acuerdo firmado en mayo por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y su homólogo ucraniano, Volodimir Zelenski. Hace pocas semanas, el Ejército de Tierra ucraniano mostraba los nuevos vehículos Vamtac de Urovesa equipados con el sistema de mortero Alakran de NTGS.
La ministra de Defensa, Margarita Robles, informó en noviembre que España entregó en la primera mitad del año alrededor de 600 millones de euros en material a Ucrania, de los más de 1.000 millones comprometidos en el acuerdo entre Madrid y Kiev.
A lo largo de 2024, el Ministerio de Defensa ha lanzado también varios mensajes al sector. Todos en la misma línea. Para el departamento, la industria debe tener la capacidad de absorber las inversiones realizadas y responder en tiempo y forma con soluciones rentables y eficientes. Este mismo mes de diciembre, Robles avisaba de nuevo en la firma del contrato de 25 nuevos Eurofighter para el Ejército del Aire y del Espacio que las empresas tienen que cumplir con los plazos de entrega.
