El Ejército del Aire y del Espacio ha desplegado por primera vez en un ejercicio internacional el sistema aéreo remotamente tripulado Predator B del Grupo de Fuerzas Aéreas RPAS del Ala 23, con base en Talavera la Real (Badajoz).
La unidad participó en el ejercicio Real Thaw 24 en Portugal, celebrado entre el 21 de mayo y el 6 de junio. El Predator se integró con éxito en distintas operaciones combinadas aérea (Comao, por sus siglas en inglés), detalla el Ejército del Aire y del Espacio.
En este tipo de operaciones participan múltiples aviones que trabajan conjuntamente para lograr un objetivo común. El dron, subraya la Fuerza Aérea, demostró excelentes capacidades para ejercer roles de apoyo aéreo cercano (CAS) y reconocimiento armado y ataques de precisión (SCAR).
El Predator B ha operado desde su base en Talavera la Real, sin incidentes en el cruce de fronteras y la integración en el espacio aéreo luso.
Predator B
El Grupo de Fuerzas Aéreas RPAS opera cuatro drones Predator B desde la base aérea de Talavera la Real, configurados para llevar a cabo misiones de inteligencia, vigilancia y reconocimiento (ISR). Este RPAS fue adquirido en 2016 a la estadounidense General Atomics.
El Predator B alcanzó en 2022 la conocida como Capacidad Operativa Inicial (IOC) después de un despliegue en el aeródromo de Lanzarote, su base secundaria de operaciones, durante el ejercicio Sirio.
El Ejército del Aire y del Espacio recibió a finales de 2023 el visto bueno para la adquisición e integración del misil guiado aire-superficie Hellfire y su equipo asociado en estos RPAS. Esta nueva capacidad mejorará las capacidades aire-superficie del Ejército de Aire y del Espacio para el cumplimiento de las misiones que tiene encomendadas, especialmente en todo lo relacionado con el apoyo y protección de las distintas unidades de las Fuerzas Armadas y de su personal en el curso de las operaciones.