​Colombia proyecta la materialización completa de su Sistema de Defensa Nacional para 2024

Ha pasado un año desde que la nueva administración colombiana, en cabeza del presidente Gustavo Petro, iniciara el proceso de materialización del Sistema Integral de Defensa Nacional (Siden).

En su momento se adelantó la concreción de proyectos de renovación de las capacidades estratégicas de las Fuerzas Militares, iniciado con la firma del proceso para la construcción de la primera Plataforma Estratégica de Superficie para la Armada Colombiana, que por medio del astillero Cotecmar y en asociación con Damen Shipyards Group, presentaron la que será su nueva fragata ligera: PES 10714C. Además, el comienzo de la construcción del nuevo Patrullero Oceánico (POC-OPV 93C) y la autorización del futuro armado de los nuevos buques de carga y cabotaje BCC 6012, proyectos todos con asignaciones aproximadas a los 430.000.000 de dólares.

El Ejército no fue ajeno a estas inversiones, y logró la compra de un sistema de artillería autopropulsada del tipo Elbit Systems Artmos 6x6 de 155x52 milímetros, así como de un nuevo lote de vehículos blindados para el transporte de personal del tipo GDLS LAV-III 8x8 DVH, equipados con estaciones remotas de armas RADS Dual Samson de 30 milímetros, procesos con costos valorados en los 407.000.000 de dólares.

La fuerza también pudo completar la incorporación de 145 4x4 AFV Textron Marine & Land Systems (TM&LS) M1117 (denominados localmente como Pegaso), donados por los Estados Unidos bajo la modalidad Excess Defense Articles (EDA) y Golden Sentry End-Use Monitoring (EUM), contando con un inventario de 214 unidades de este modelo.

Por su parte, la Fuerza Aérea (FAC) pudo concretar parte de su proyecto de Fortalecimiento de Fuegos Aéreos, a través del cual logró terminar de desarrollar su Sistema Integral de Defensa Aérea Nacional (Sisdan), y la compra de un sistema de defensa antiaérea del tipo Israel Aerospace Industries (IAI) Barak MX, así como de un sistema de guerra electrónica Elbit Systems-EW que serán integrados a sus nuevos Boeing Company 737-700/800, sumándose además la compra de cuatro nuevos Beechcraft T-6C Texan-II, todo lo anterior por valores cercanos a los 299.000.000 de dólares.

En resumen, inversiones por alrededor de 1.136.000.000 de dólares tendientes a crear, renovar y fortalecer capacidades para cada una de las fuerzas, pero estando pendiente y por definir el proceso de renovación de la flota de aviones caza y de aeronaves lifts´s.

Retos pendientes

En el marco de relaciones en Defensa y Seguridad recientemente afectadas por el distanciamiento diplomático entre Colombia e Israel, la FAC ha planteando oficialmente la necesidad de renovar la actual flota de cazas de superioridad aérea para completar su Sisdan (Estudio Estratégico EEAPEF-2041). Esto se da en razón a la próxima salida del servicio operacional de sus IAI Kfir C10/12 COA, que tienen contratos de mantenimiento y suministro de piezas y componentes garantizados solo hasta diciembre del 2024. Ante esta situación el actual Gobierno ha reconocido la necesidad de actualizar la flota de cazas, teniendo como posibles opciones de reemplazo a los Dassault Aviation Rafale C/F3 y a los Airbus (Eurofighter) Typhoon Tranche-3.

Sin embargo, cabe añadir que está pendiente también el proceso de reemplazo de los Cessna A-37B, teniendo como opciones a los Korean Aerospace Industries (KAI) TA/FA-50 y Leonardo M-346FA. La necesidad es contar con un vector a reacción para operar sobre el Mar Caribe, en misiones antinarcóticos o de control y vigilancia del espacio aéreo, tal y como en su momento fueron desplegados tan exitosamente los A-37.

Pero además faltan decisiones en torno a la incorporación de un tanque principal de batalla (MTB), entre opciones estadounidenses (GDLS M1A2) y surcoreanas (Hyundai Precision Works/Rotem K1A1), así como de un sistema Vshorad móvil tanto para el Ejército como para la Infantería de Marina (de los tipos SAAB RBS-70NG o MBDA Systems Mistral-3). De igual menera, se espera la compra de un sistema ATGM del tipo Rafael Spike ER para el Ejército y para la Infantería de Marina, la renovación de la flota de vehículos tácticos del Ejército con camiones Navistar Defense, de vehículos mrap y apc de los tipos Armor International Hunter TR-12  e IDS Titán-C y la concreción del desarrollo del proyecto de un nuevo fusil colombiano diseñado por Indumil, entre varias otras necesidades aplazadas y teniendo en cuanta las obligaciones generadas por ser socios preferentes de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).

Retos pendientes frente a estudios y proyectos más que justificados (técnica y financieramente) en momentos en que son obvias las necesidades de proteger los principales activos económicos, enérgeticos y ambientales y en tiempos de fuertes tensiones geopolíticas a nivel internacional que demuestran sobradamente la urgencia de contar con medios disuasivos frente a potenciales hipótesis de conflicto.