Dos aviones de transporte Airbus C295 de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM) trasladaron a Guatemala y Honduras a las 23 víctimas del incendio del centro de inmigrantes en Ciudad Juárez, Chihuahua, ocurrido a finales de marzo.
Los cuerpos de los migrantes, 17 de Guatemala y seis de Honduras, viajaron acompañados de familiares y autoridades de ambas naciones. Previamente, habían permanecido a la espera de su repatriación en la funeraria Perches de Ciudad Juárez.
Recibimiento
En Guatemala, 17 caravanas fúnebres partieron la noche del pasado martes desde una base de la Fuerza Aérea Guatemalteca (FAG), en el Aeropuerto Internacional La Aurora, en Ciudad de Guatemala, hasta los hogares que originalmente habían abandonado los jóvenes que buscaban llegar a Estados Unidos y murieron bajo la custodia de las autoridades mexicanas.
En Honduras, los cuerpos arribaron a la Base Aérea 'Enrique Soto Cano', de la Fuerza Aérea Hondureña (FAH), ubicada en el Aeropuerto Internacional Palmerola, en la ciudad de Comayagua, a casi dos horas al norte de Tegucigalpa.
Siete salvadoreños también fallecieron en el mismo incendio, los cuales fueron trasladados a su país, también por la FAM, el pasado 9 de abril.
Las autoridades salvadoreñas consideran esta tragedia un “crimen de Estado” y han exigido al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, que se condene a los culpables.