La Armada incrementará su presencia en Melilla con un patrullero de vigilancia costera

La Armada operará a partir del próximo verano un patrullero de vigilancia costera, conocido por las siglas (PVC), en la Comandancia Naval de Melilla. La embarcación será la primera de este tipo de la Armada que tendrá como base de operaciones permanente el puerto de la ciudad autónoma.

La entrada en servicio del nuevo patrullero está prevista para mediados de este año, de acuerdo con el plazo de ejecución del contrato. El astillero gallego Rodman trabaja en la construcción de esta patrullero desde finales del año pasado. La Armada ha elegido el numeral P-84 para la embarcación que todavía no tiene nombre, adelanta el diario ABC.

El contrato, que también incluye dos lanchas de instrucción, está valorado en algo más de ocho millones de euros. La firma entre la Armada y el constructor naval tuvo lugar en octubre del año pasado. La llegada de un patrullero a Melilla fue anunciado hace unos meses por la secretaria de Estado de Defensa, Amparo Valcarce, durante una visita a las instalaciones de Rodman.

El buque será muy similar al patrullero P-83 Isla de León, en servicio en Ceuta desde principios de este 2023, como publicó Infodefensa.com. El P-84 pertenecerá también -como el P-83- a la clase Rodman 101, con una eslora de 31 metros, una dotación de 10 personas, una velocidad máxima de 25 nudos y dispositivos electroópticos y de navegación que permiten operar tanto de día como de noche con plena capacidad operativa. El patrullero también contará para la autodefensa con un afuste para la instalación de una ametralladora ligera.

Al igual que el patrullero desplegado en Ceuta su principal misión será contribuir a la Acción del Estado en la Mar mediante la protección de los intereses marítimos nacionales y el control de los espacios marítimos de soberanía e interés nacional, contribuyendo así al conjunto de actividades que llevan a cabo las distintas administraciones públicas con responsabilidades en el ámbito marino.

En este caso, su área de actuación serán las aguas de soberanía española próximas a la ciudad de Melilla y también la zona del mar de Alborán.

Tanto el patrullero de Ceuta como el nuevo de Melilla son embarcaciones de vigilancia de costa, más que buques militares al uso. Este tipo de barcos, con pequeñas modificaciones, también operarán en otros organismos del Estado responsable de la seguridad y la lucha contra delitos en la mar como Aduanas y el Servicio Marítimo de la Guardia Civil (Semar).

Hasta la fecha, la Armada no contaba buques de estas características con base permanente en la ciudad autónoma de Melilla. Su presencia estaba limitada a embarcaciones menores de apoyo a la entrada y salida de otros barcos al puerto de la ciudad.