Incluso antes de ingresar al conjunto de fábricas que forman el complejo industrial que Avibras Aeroespacial y Defensa posee en São José dos Campos, São Paulo, impresiona dimensionar la enorme superficie que ocupa el centro industrial de la empresa de defensa brasileña. Allí dentro, por ejemplo, hay 36 km de carreteras, 18 de ellos asfaltados. Durante el recorrido por las instalaciones, algunas reveladas por primera vez a la prensa especializada brasileña e internacional, Infodefensa.com pudo conocer detalles de los distintos productis desarrollados por Avibras, especialmente, el misil táctico de crucero AV-TCM.
El gerente de Desarrollo de Negocios de Defensa, Marcos Agmar de Lima Souza, un veterano dentro de la compañía, recibió en exclusiva a Infodefensa.com en el ala administrativa del complejo y ya en el auditorio anexo se celebró una sesión informativa sobre las instalaciones, los procedimientos y las estrictas medidas de seguridad para, a continuación, exhibir una línea del tiempo ilustrada con la historia de Avibras, situándose en los productos, las tecnologías y los retos experimentados por la empresa a lo largo de las seis décadas de actividad.
El ingeniero Marcos Agmar de Lima Souza presenta la cartera de Astros. Foto: Avibras
Ya en la sala de exposiciones, se mostraron las maquetas a tamaño real de las joyas de la empresa: el misil táctico de crucero AV-TCM; el misil aire-aire de matriz activa de 5º generación A-Darter, fruto del programa binacional entre Brasil y Sudáfrica; y del misil antitanque guiado por fibra óptica/multirol FOG-MPM, junto también a la familia completa de cohetes y algunos simuladores de vehículos que componen el sistema Astros.
El primer sector visitado fue el área de ingeniería de software embarcado en vehículos, donde se pudo observar la integración y las pruebas de la electrónica dedicada al misil táctico de crucero AV-TCM, que es muy funcional y presenta una interfaz sencilla de manejar, con pantallas en color de alta resolución y accionamiento simplificado.
Después, en el área de ingeniería de software embebido de munición, fue posible observar los trabajos de simulación y ensayo del funcionamiento del AV-TCM, incluyendo el movimiento de la sección de cola y de los actuadores de las alas semiretráctiles, que se abren poco después del lanzamiento, entre otras innumerables acciones que ocurren durante el vuelo del arma, que finaliza con una ganancia de altitud y el picado contra el blanco a 90º, lo que maximiza la fuerza cinética del impacto con la ojiva.
Para "sentir" los movimientos precisos de la superficie de control del misil durante la simulación, basta con colocar la mano sobre el empenaje. Foto: Avibras
Sistemas de navegación
En la sala de ubicación conjunta del AV-MTC y el cohete guiado AV-SS-40G se pudo observar cómo se realiza la calibración de los sistemas de navegación de la electrónica de a bordo del misil y el cohete. Ambos utilizan un sistema de navegación inercial o INS (Inertial Navigation System) para encontrar objetivos estáticos en tierra.
A este respecto, cabe hacer una advertencia muy importante. A finales de 2022, Avibras anunció su victoria en un proyecto relacionado con el área temática de guiado, control y navegación para aplicaciones de misiles y cohetes. La empresa iniciará el desarrollo, en el primer semestre de 2023, de una Unidad de Ayuda a la Navegación para Misiles Balísticos, utilizando sensores de sistemas microelectromecánicos e innovadores algoritmos no lineales de diseño propio, lo que elimina una vulnerabilidad crucial relativa a elementos críticos importados en el sistema. Para el desarrollo de este proyecto, Avibras recibirá una inversión de 14.935.529,92 reales (2,9 millones de dólares) a lo largo de tres años provenientes de la Financiadora de Estudios y Proyectos (Finep).
Para lograr este objetivo el Espacio Avibras de Tecnología e Innovación (EATI) trabaja en colaboración con el Centro de Investigación Von Braun, que desarrolla proyectos de innovación en los segmentos de Transformación Digital, Electrónica, Automatización Industrial, Blockchain, IoT, Data Science, Transporte, Logística, Automoción, Sanidad y Física Aplicada.
Además, el cohete AV-SS-40G está siendo descontinuado en favor del nuevo proyectil AV-SS-150, con alineación láser y correcciones al blanco realizadas por cuatro aletas cruciformes en la parte delantera del arma, que tiene un alcance nominal de 150 km.
Esta nueva capacidad del Astros lo equipara a otros sistemas similares del mercado -como el Himars y el M270 MLRS- en cuanto a alcance de los cohetes guiados y poder destructivo de las ojivas, que pueden ir desde submunición antipersona hasta cargas perforantes antitanque/antimaterial.
El nuevo AV-SS 150, con 150 km de alcance y precisión de guiado láser. Arte: Avibras
En el área de ingeniería electrónica, se pudo verificar el desarrollo de placas de circuitos impresos y otros componentes que cumplen con todos los requisitos de Avibras en este sector vital, el cerebro de las armas, evitando embargos y controles puestos por naciones que ya dominan estas tecnologías.
Motor S50
En la gran área de materiales compuestos se presentó toda la maquinaria que construye la vasija de presión del motor S50, destinado al programa espacial brasileño, y las formas y piezas en este material desarrolladas para el misil de crucero, con el objetivo de ahorrar peso. Una de las piezas del AV-MTC demostradas, la entrada de aire de material compuesto, tiene una forma avanzada y un peso reducido, además de ser extremadamente resistente.
El propulsor S50 está hecho de fibra de carbono y utiliza tecnología moderna para unir el composite con el aluminio, materiales difíciles de manipular cuando se ponen a trabajar juntos. A pesar de los problemas y desafíos verificados durante la producción de esta compleja pieza, Avibras logró superarlos y hoy la sección de propulsión S50 es una realidad en camino hacia su segunda prueba en banco apuntando al 100% de la capacidad de disparo. Esta prueba se realiza de forma controlada en las instalaciones del Centro Tecnológico da Aeronáutica, situado junto a la zona de Avibras.
El motor S50, construido en fibra de carbono, es una de las contribuciones de Avibras al Programa Espacial Brasileño. Foto: Avibras
Tras un desplazamiento motorizado, llegó a la zona de producción mecánica de tubos, motores y contenedores de lanzamiento. En esta fábrica, máquinas especiales estiraban el metal produciendo tubos sin soldadura de grosor constante.
Una vez finalizado el proceso de estirado, estos tubos están listos para recibir los distintos procesos que los convertirán en cohetes. Se añade una turgencia (relieve anular) a la forma del tubo, lo que disminuye la superficie de contacto del cohete con las paredes interiores de la caja de lanzamiento. Esta precisión constructiva milimétrica, mantenida con un estricto control de calidad, tiene como ventaja la reconocida exactitud y estabilidad de los cohetes en el lanzamiento y durante el vuelo hasta el objetivo.
El proceso de estiramiento de tubos sin soldadura garantiza la precisión a los cohetes disparados por los Astros. Foto: Avibras
El dron Falcon
En el hangar del UAV Falcon se pudo comprabar sus impresionantes dimensiones: la envergadura del dron es mayor que la del avión T-27 Tucano de Embraer Defesa e Segurança. Equipado con un motor Rotax aspirado, el Falcon tiene un tren de aterrizaje fijo y hoy en día aviones más pequeños realizan las mismas misiones que él a menor coste.
Sin embargo, el futuro depara nuevas aplicaciones para el dron, ya que un nuevo motor turboalimentado no solo debería aumentar la altitud de vuelo y la velocidad de crucero, sino que los dos puntos duros que ya tiene el Falcon (uno en cada ala) podrán recibir la integración de armas de hasta 60 kg. Para convertir al Falcon en un UCAV turbohélice legítimo aún resta añadirle un sistema de guiado, mando y control.
El Falcon es una plataforma aérea con potencial de empleo en misiones armadas (UCAV). Foto: Avibras
Tras un nuevo rodaje del motor del vehículo en el que nos desplazábamos por las extensas instalaciones tuvimos acceso a la más "secreta" de estas: el túnel de aire del turboventilador, una combinación de conductos, enormes soplantes industriales y un gran banco de pruebas sólidamente sujeto al suelo, con una sala de control blindada y cerrada.
En estas instalaciones, los motores turboventilados del AV-MTC se prueban y ensayan "en vuelo" realizando misiones completas, los sopladores se encargan de alimentar con abundante aire forzado las tomas de aire del misil.
El túnel aerodinámico de turbina y su sala de control, 100% tecnologías Avibras. Foto: Avibras
Este aire genera las presiones y otras fuerzas necesarias para simular el vuelo real, los sensores y otros equipos registran cada parámetro y envían estos datos a la sala de control, que está protegida por un blindaje para evitar cualquier posibilidad de lesiones al equipo de pruebas. Un túnel de escape para liberar el empuje completa los recursos disponibles.
Vista exterior del túnel de pruebas de turborreactores. Foto: Avibras
Otro sector crítico de Avibras visitado por el informe fue el área de producción de motores para cohetes, una construcción en forma de anillo geocéntrico, cuyos pasillos curvos sirven para disipar la fuerza de una explosión, en caso de accidente.
Unas carretillas elevadoras transportan enormes ollas de propulsores mezclados en una enorme máquina que más bien parece una batidora de pan gigante, todo el proceso controlado a distancia por varias cámaras. Estas cacerolas se llevan a otra sala donde se acoplan a máquinas especiales que llenan los cohetes con la carga propulsora en instalaciones especialmente diseñadas por la ingeniería Avibras con soluciones propias, que implican hasta tres plantas de equipos, además de los vistos durante la visita. El proceso es altamente secreto, pero funciona basándose en ideas sencillas y probadas.
Detalle del banco con la sección de motores del AV-MTC alimentada y en "vuelo". Foto: Avibras
Tras el llenado, los tubos se colocan en soportes circulares especiales adaptados a cada tipo de cohete y se introducen en compartimentos estancos donde se cura el material propulsor, un proceso que puede durar de unas horas a unos días, según el tipo de cohete que se fabrique. Para el cohete SS-150, por ejemplo, fue necesario crear un nuevo e ingenioso equipo que garantizara la misma calidad del llenado realizado con sus hermanos menores.
Hubo que superar el mismo reto, a una escala aún mayor, para la fabricación del motor S50 para el programa espacial brasileño, y la idea utilizada por Avibras para cumplir los requisitos y la calidad necesaria exigió mucho trabajo a los ingenieros y técnicos de la empresa. A pesar de los problemas iniciales, estos objetivos se alcanzaron.
Un misil AV-MTC real sometido a las últimas pruebas de integración. Todo el software y el entorno operativo de la interfaz de funcionamiento del misil de crucero es desarrollo de Avibras. Foto: Avibras
En la zona de integración final de cohetes y misiles, cada producto recibe su ojiva y se comprueban y verifican uno a uno todos sus parámetros. No hay muestreo en Avibras: cada cohete, cada componente, todo es trazable desde la materia prima recibida hasta la última acción antes de la entrega final al cliente. Desde máquinas de rayos X hasta procesos micrométricos, todo se hace para garantizar la máxima calidad del producto final, lo que se traduce en seguridad durante la producción, manipulación y transporte de artículos críticos como cohetes y misiles.
La zona destinada a la línea de producción de vehículos de Avibras. Foto: Avibras
Producción de vehículos
El paso por la línea de producción de vehículos fue otro punto álgido de la visita. Además de la presencia de los dos prototipos del blindado 4x4 Guará, el original y el más sofisticado 4WS, lo primero que observamos es una cantidad considerable de chasisTatra 6x6 0km pintados en tonos arena (desierto), que indica el probable origen internacional del frustrado cliente. Esta venta malograda, principalmente a raíz de la crisis de la pandemia del Covid-19, ha supuesto un duro golpe para Avibras y es una de las razones que dieron lugar a la solicitud de recuperación judicial por la que atraviesa la empresa.
La zona destinada a la línea de producción de vehículos de Avibras. Foto: Avibras
Otra presencia destacada en la línea de producción de vehículos fue el prototipo del nuevo vehículo del sistema Astros, centrado exclusivamente en el apoyo al misil táctico de crucero.
Almacenados herméticamente en una caja presurizada con gas inerte, los misiles AV-MTC solo se llenan de parafina y aceite lubricante momentos antes de ser cargados en los lanzadores y quien realiza este trabajo logístico es el AV-UAS.
Se trata de una combinación de AV-VBA+AV-PAS (plataforma de apoyo en tierra), este vehículo transporta una cantidad considerable de parafina de aviación y aceite lubricante. Un vehículo tipo AV-UAS sirve una batería de seis piezas cargada con misiles, es decir, 12 AV-MTC. Si no se lanzan los misiles, el AV-UAS también se encarga de retirar y eliminar adecuadamente la parafina y el aceite no utilizados.
Finalizando la visita, se accedió a las áreas de pintura, ingeniería mecánica y aeroespacial, ingeniería química y detonación (cómo detonar explosivos de forma controlada), producción de placas electrónicas (todas las placas y componentes electrónicos de los sistemas de armas Avibras se fabrican en estas instalaciones, garantizando la independencia frente a embargos) y al área de producción de cables.
El vehículo AV-UAS lleva una batería de seis piezas cargada con misiles. Foto: Avibras
Al final de una jornada de actividades, impresiona el enorme legado tecnológico de Avibras, 100% brasileño de principio a fin. La capacidad de los ingenieros de la empresa es reconocida en todo el mundo, hasta el punto de que algunos de los presentados a Infodefensa.com durante la visita se marchaban para asumir nuevos retos en empresas extranjeras, algo inevitable durante una recuperación judicial.
Así como los cohetes y misiles de Avibras defienden Brasil, llegó la hora de que el Estado brasileño defienda con agilidad, y sin demora, el inmenso capital tecnológico que Avibras construyó en seis décadas de actividades, so pena de ver, una vez más, desaparecer material humano y conocimiento tecnológico brasileño por falta de apoyo gubernamental. Cuando se pierde un Avibras, no se puede recuperar después lo que había antes. Es un hecho.
La cartera del Astros incluye cohetes balísticos y guiados y un misil de crucero. Foto: Avibras