El próximo paso lleva camino de ser el suministro de carros de combate de fabricación occidental a Ucrania. Esto es lo que indican numerosos expertos, que alegan esta vía como necesaria para que Kiev continúe con su esfuerzo militar frente a Rusia. La puerta hacia el envío de blindados con mayor capacidad de combate al teatro ucraniano la abrió la semana pasada Francia, al dar luz verde a un número no revelado de cazacarros sobre ruedas AMX-10 RC, en un movimiento que Estados Unidos y Alemania han dado ahora continuidad.
Washington ha incluido en su último lote de ayuda militar a Ucrania, anunciado este viernes y valorado en algo más de 3.000 millones de dólares, medio centenar de vehículos de combate de infantería (IFV) Bradley. Al mismo tiempo, Berlín ha echado mano de sus Marder para anunciar que va a enviar a Kiev 40 unidades de este modelo. Se trata del mismo con el que Alemania también acaba de suplir los más modernos Puma para emplearlos en la Fuerza Conjunta de Muy alta Disponibilidad de la OTAN, de la que se encarga desde principios de año el país. Los problemas técnicos detectados en los Puma llevaron al gobierno alemán a recuperar sus viejos, y más fiables, Marder.
Los 50 Bradley estadounidenses llegarán a Ucrania con un paquete de municiones para alimentar las armas que equipan de medio millar de misiles anticarro TOW y 250.000 proyectiles de 25 mm. Además, Estados Unidos incluye en su nuevo lote otro centenar de blindados M113, que se suman a los 200 que ya había enviado anteriormente; 55 vehículos protegidos resistentes a minas y emboscadas (MRAP) y 138 todoterremos HMMWV, con lo que la ayuda norteamericana ya suma casi 1.260 unidades de este 4x4 transferidas a Kiev.
Patriot alemanes
Además de anunciar el envío de IFV Marder, Alemania, también se ha unido a la iniciativa estadounidense de facilitar a Ucrania misiles Patriot, anunciada a finales del año recientemente acabado, y que también ha supuesto un importante paso en el incremento de la entidad de la ayuda militar que recibe el país. Berlín se ha comprometido a facilitar una batería adicional de este arma interceptora de misiles balísticos y de crucero a largo alcance.
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, se dirigió la semana pasada a los líderes occidentales, tras conocerse el suministro francés de AMX-10 RC, para que siguieran su ejemplo, y añadió: “No hay un motivo racional para que Ucrania aún no haya recibido carros de combate occidentales”. De momento, la ayuda de estas naciones a Kiev en este aspecto se ha limitado al suministro de antiguos carros de factura soviética, en concreto al menos 363 T-72 y 28 M-55S, que es versión modernizada de los antiguos T-55
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