El A400M podrá llevar a cabo en un futuro no muy lejano misiones como avión apagafuegos. Airbus, fabricante de la aeronave, trabaja en un nuevo kit que permitirá a este avión de transporte militar, adquirido ya por una decena de países, intervenir en los operativos de lucha contra los incendios forestales.
El sistema, diseñado por un equipo de ingenieros en Madrid, estará listo a finales de este mismo año y la compañía tiene previsto comenzar a ofrecer el kit a nuevos clientes del A400M y también a países que ya operan el avión a partir de 2022, según confirma la directora de Tecnología, Innovación y Desarrollo para Airbus Defence and Space, Belén García Molano, al diario El Español.
Este proyecto forma parte de los planes de la compañía para incrementar las capacidades de la aeronave, ensamblada en las instalaciones de Airbus en San Pablo (Sevilla). Desde la compañía subrayan que, en el caso de la lucha contra los incendios, el A400M puede alcanzar zonas inaccesibles para otros aviones, puesto que es capaz de volar a baja cota y en condiciones de visibilidad limitada.
García Molano señala que la empresa busca con esta capacidad adelantarse a las necesidades de sus clientes –hasta ahora ninguno usuario del avión había solicitado este kit- y ofrecer una solución que evitaría la adquisición de una plataforma específica para estas misiones de extinción del fuego, en un momento en el que los grandes incendios forestales son unos de los grandes desafíos del cambio climático.
Airbus ya desarrolló en su día un kit apagafuegos para el avión C-295, a petición de un cliente, sin embargo, finalmente no fue instalado en la aeronave.
De esta forma, el A400M sumará pronto una nueva capacidad. El avión puede volar distancias de 8.700 kilómetros a una altitud de crucero de 11.300 metros y a una velocidad de 0,72 Mach. Su bodega mide cuatro metros de ancho por otros cuatro de alto y casi 18 metros de largo. Su carga útil máxima es de 37 toneladas en un volumen de 340 metros cúbicos.
Estas características le permiten transportar, por ejemplo, un helicóptero NH90, un CH-47 Chinook o dos vehículos blindados pesados. Con capacidad para operar en pistas cortas y no preparadas, también es capaz de llevar un camión logístico pesado, una lancha de rescate o incluso grandes grúas móviles y excavadoras. Si se utiliza para el despliegue de tropas, entonces puede llevar hasta 116 soldados o paracaidistas.
Además, puede actuar con avión de reabastecimiento en vuelo a través de un pods instalados bajo las alas o un sistema de repostaje basado en una manguera. En España, el Ejército del Aire también lo ha certificado para el lanzamiento de cargas pesadas, mientras que Airbus ha hecho ya pruebas para poner en el aire en un futuro drones en pleno vuelo.