Alemania desbanca a Rusia como tercer país con mayor gasto militar

Berlín destinará a su defensa 83.500 millones de dólares en 2024. Son 26.000 millones más que los empleados por el país en 2021, en virtud del incremento anunciado por el canciller del país, Olaf Scholz, el domingo. Con este espectacular crecimiento Alemania pasa a ser el tercer mayor gastador militar mundial.

A la vista de esta medida, la especialista de defensa Madeline Wild, de la analista británica Global Data, concreta que estos anuncios realizados en el Parlamento alemán (Bundestag) “marcarán un cambio extraordinario e inesperado en la política de defensa”. El crecimiento prometido “catapultará a Alemania a convertirse en el tercer país que más gasta en defensa a nivel mundial, solo por detrás de EEUU y China”.

Según las estimaciones realizadas por la analista londinense, el presupuesto de defensa alemán será de 83,5 mil millones de dólares en 2024, lo que equivale a un aumento del 45% respecto a los 57,5 millones de 2021.

En el nuevo contexto, “como el tercer país que más gasta en defensa, Alemania solo tendrá que concentrarse en financiar las fuerzas convencionales gracias a su condición de no nuclear, y el presupuesto no tendrá que destinarse a financiar un elemento de disuasión nuclear, que puede ser un agujero negro presupuestario para los estados nucleares”. En cambio, añade, “la Bundeswehr [como se denominan las Fuerzas Armadas del país en alemán] puede financiar áreas que necesitan una modernización drástica después de sufrir años de bajo gasto en defensa”.

Helicópteros Tigre y NH-90

Wild cree que el dominio aeroespacial probablemente recibirá una financiación sustancial, ya que el proceso de reemplazo de la flota de aviones de combate Tornado continúa “y los helicópteros EC-665 Tigre y NH-90 TTH del Ejército han luchado para alcanzar niveles de preparación muy por encima del 15%”. Además, es probable que el programa de futuro sistema de combate aéreo FCAS, que Alemania desarrolla junto a Francia y España, y que incluye el desarrollo de un caza de nueva generación, reciba una inversión significativa, explica la experta.

“Competencia feroz”

“La competencia entre los proveedores de defensa globales será feroz y los posibles beneficiarios serán los líderes nacionales alemanes y sus contrapartes europeas que ya son jugadores bien establecidos en el mercado de defensa alemán”, apunta Madeline Wild.

La especialista recuerda que durante años ha existido en el país una resistencia pública a aumentar el presupuesto de la Bundeswehr a un nivel lo suficientemente sustancial como para alcanzar el objetivo del 2% del PIB establecido por la OTAN. La pandemia de covid-19 agravó además estas políticas con pocos dispuestos a impulsar el gasto militar frente a la necesidad económica en otras partes del gobierno.

Desembolso extra de 100.000 millones

El anuncio de Olaf Scholz el pasado domingo se concreta en que Alemania cumplirá con el requisito de la OTAN de que los miembros gasten el 2% de su PIB en defensa para 2024, y también ha anunciado la creación de un fondo extrapresupuestario de 100.000 millones de euros.

Wild apunta a la agencia de adquisiciones militares alemanas, la BAINBw, como un obstáculo potencial para la velocidad a la que se podrán inyectar estos fondos adicionales, ya que anteriormente ha llegado a dejar sin efecto hasta el 10 % del presupuesto de adquisición por “fallas sistemáticas graves en el departamento debido a la burocracia arraigada y la escasez de personal”. En todo caso, estima, “este nivel sin precedentes de apoyo fiscal significa que los nuevos fondos tendrán un impacto tangible, incluso si se ve afectado por políticas y procedimientos”.