La alargada sombra rusa impulsa a la OTAN a aumentar los gastos en defensa

(Infodefensa.com) G. Soriano, Madrid – El papel interpretado por Rusia en el conflicto de Ucrania ha soliviantado a los socios occidentales hasta el punto de lograr que Francia suspendiese, al menos por el momento, la entrega de los buques portahelicópteros Mistral que le encargó Moscú por 1.200 millones. Es la consecuencia más espectacular de este asunto en el mercado militar, pero no la única, Italia, por ejemplo, también ha suspendido un programa, a menor escala, de desarrollo de submarinos con Moscú, y el gobierno alemán revocó la autorización a Rheinmetall de un negocio, valorado en cien millones de euros, de venta de material militar a Rusia

Pero al margen de estos contratiempos, la industria armamentística rusa sigue con paso firme una senda de crecimiento que le llevó a exportar, según las previsiones de Rosoboronexport, más de 10.000 millones de euros en 2014, pese a las sanciones. El país, según su presidente, Vladímir Putin, el país ya se ha situado a la cabeza de las exportaciones de guerra y de otro armamento naval, donde alcanza casi un tercio de toda la cuota de mercado.

Por otra parte, las tensiones en Ucrania están alimentando un cierto giro en los gastos militares de algunos países del entorno, que han anunciado incrementos en sus esfuerzos por dotarse de más y mejores sistemas de armas. Es el caso ,entre otros, de Polonia (que llegó a amenazar a Francia con malograr posibles contratos si entregaba los Mistral a Rusia), Holanda (especialmente sensible tras el derribo de un avión de Malaysia Airlines cargado de neerlandeses sobre los cielos ucranianos) y Dinamarca.

La situación en Ucrania y los movimientos rusos en el conflicto también estaban de telón de fondo en al acuerdo que alcanzó la OTAN a principios de septiembre de incrementar los gastos militares hasta al menos el 2 por ciento del producto interior bruto (PIB) de sus socios (España dedica ahora en torno al 0,8 por ciento) en los próximos años. Occidente trata con esta medida de hacer frente al impulso ruso, que le ha llevado a incrementar en los últimos cinco años un 50 por ciento sus gastos de defensa mientras los aliados de la OTAN los reducían en torno a un 20 por ciento en el mismo periodo.

China y Arabia Saudí también están adquiriendo un creciente protagonismo en el gasto militar. Ambos países, junto a Rusia, han doblado sus presupuestos de defensa en los últimos diez años. En general el dinero destinado a defensa se ha incrementado en todo el mundo excepto en Occidente, donde ha bajado, una tendencia que ya lleva varios años y que acaba de confirmarse a finales de 2014.

En otras latitudes otras situaciones conflictivas también llevaron a planificar aumentos de gastos. Es el caso de lo acontecido en torno a Japón y China por la disputa de algunas islas, que ha impulsado al Ministro de Defensa nipón a solicitar el mayor presupuesto militar de su historia. Se trata de casi 36.700 millones de euros con los que, entre otros, se quieren adquirir convertiplanos, drones y aviones furtivos.

Informes de impacto

El ejercicio 2014 también trajo otras noticias de interés a partir de informes encargados por distintos gobiernos con resultados muy llamativos. Es el caso del estudio solicitado por el propio Pentágono que revelaba importantes deficiencias en el arsenal nuclear estadounidense. En él se advierten de problemas de tal calado que la reforma del arma atómica norteamericana supondrá un gasto de 6.000 millones de euros, según los cálculos de este trabajo que ha sacudido la conciencia del país sobre un asunto tan delicado que rememora la Guerra Fría.

Alemania también tuvo su propio estudio encargado por Defensa por el que temblaron los cimientos de algunos de sus principales programas. Un trabajo presentado en octubre de 140 páginas criticaba el modo en el que se había procedido en sistemas tan destacados como los de los aviones Eurofighter y A400M, los helicópteros Tigre y NH90, el del blindado Puma IFV, y el de la fragata Tipo 125, entre otros.

De otra parte, singularmente renacía en el país uno de los proyectos más controvertidos de los últimos años, el del dron Euro Hawk, abandonado en mayo de 2013 y recuperado ahora por la ministra Ursula von der Leyen.

En los aledaños de occidente este año también ha llamado la atención el creciente protagonismo de Turquía, un gran comprador de armamento que está trabajando por consolidar una potente industria militar, para lo que quiere concentrar el sector en unas pocas empresas, una de las cuales pretende colocar entre las cincuenta mayores del mundo. El presidente del país, Recep Tayyip Erdogan concretó que el objetivo de su gobierno es situar a la nación turca entre los diez primeros productores de sistemas de armas en 2023, cuando se cumpla el centenario de la república. De momento, entre 2008 y 2012, el país alcanzo el vigesimocuarto puesto de los mayores exportadores de armamento del mundo, para lo que en el balance de este mismo año ya esperan lograr un aumento de esas ventas al exterior del 14 por ciento.

De los muchos sistemas nuevos que ha visto nacer 2014 quizá destaque por su singularidad el desarrollo de una bala capaz de corregir su trayectoria después del disparo hasta alcanzar su objetivo, que ya ha comenzado a probarse. Se trata de una munición de calibre 12,7 mm inteligente denominada Exacto, por las siglas de Extreme Accuracy Tasked Ordnance, y que ha sido desarrollada por la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa de Estados Unidos (DARPA).