El Comando General de las Fuerzas Militares Colombianas (FFMM), a través del Ministerio de la Defensa, ha adquirido nuevos fusiles del tipo Indumil Galil ACE-23 en calibre 5.56x45 milímetros. El contrato fue suscrito, el pasado 15 de agosto, entre el Ministerio de la Defensa y la compañía colombiana teniendo como objeto la adquisición de armamento, equipos, munición, explosivos y repuestos con destino al Comando General FFMM, al Ejército Nacional, a la Armada Nacional y a la Fuerza Aérea Colombiana, con un plazo de entrega de cuatro meses.
El proceso, con número documento soporte 2020432008275643 (No. 08/2020 MDN-COGFM-EJC-ARC-FAC), tuvo un costo de 10.156.139 de dólares, no especificándose el número exacto fusiles y municiones de la entrega, que incluye también granadas y repuestos para lanzagranadas del tipo MGL de 40 mm, según explicó a Infodefensa.com Alex Carrillo, especialista técnico y financiero en este tipo de procesos.
El ACE 23 hace parte de la línea ACE manufacturada por Indumil, con un largo de 975 milímetros (895 milímetros plegada la culata), un peso de 3,44 kilogramos, con alcances efectivos de 300 a 500 metros y un sistema de recarga accionada por gas con cerrojo rotativo, que le permite disparar hasta 700 cartuchos por minuto a una velocidad de salida del proyectil de 915 metros por segundo, contando con un cargador extraíble curvo de 35 proyectiles.
Este fusil se caracteriza por su bajo peso como resultado de la sustitución de parte del material metálico y su reemplazo por otros de diferente composición, así como el acoplamiento de miras reflectivas iluminadas –diurnas/nocturnas- del tipo Meprolight Technologies LTD (Mepro 21 y Mor) y la incorporación de cinco rieles de adaptación del tipo picattiny, que mejoran la precisión del arma permitiendo disminuir su consumo de munición por la efectividad en el disparo, que se logra gracias al balanceo de las fuerzas de retroceso y en los tiempos de recorrido del disparador.
En este sentido, su culata puede ser regulada en seis posiciones diferentes ajustándose no solo a la talla del combatiente sino a las circunstancias del combate, mejorando la efectividad del disparo y la disposición del portador pues posee la capacidad de amortiguar el impacto del retroceso. Con esta adquisición las Fuerzas Militares continúan con el proceso de reemplazo de sus fusiles IWI/Indumil Galil AR de 5.56x45 milímetros todavía en inventario.