Después de cierta especulación sobre reemplazos o programas de mejora, finalmente, a través de las carteras de inversión publicadas por la autoridad hacendaria y presupuestal de México, la SHCP, se confirma que 119 vehículos blindados Panhard ERC-90 del Ejército mexicano serán sujetos a una modernización de sistemas de transmisiones y armamento.
La cartera de inversión, así como la versión pública del análisis costo-beneficio hecha por la Secretaría de la Defensa Nacional, no aporta mayores detalles sobre el programa de mejora; sin embargo, queda claro que la modernización estará dirigida a incorporar nuevos sistemas de control de armamento en las torretas Hispano Suiza de los blindados en la forma de sistemas de telemetría laser y visión nocturna; una mejora que sin duda elevará las capacidades técnicas del que es el principal vehículo de combate blindado en México.
El Lynx se incorporó en 1982 a los regimientos blindados del Ejército de México para hacer las labores de un tanque ligero, ya que México no enfrenta una amenaza acorazada simétrica, aunque se trata en esencia de un blindado 6X6 con capacidad anfibia diseñado para reconocimiento. Sin embargo, el Lynx encontró un nicho importante en estas tareas al ser uno de los vehículos blindados más numerosos y con mayor poder de fuego del Ejército mexicano, ya que originalmente se adquirieron 125 unidades a Francia.
Aunque tienen 35 años de servicio los ERC-90 Lynx mexicanos mantienen un perfecto estado de operación ya que periódicamente son sujetos a los mantenimientos que la Dirección de Industria Militar de la Sedena puntualmente ofrece. Lo que ha extendido y garantizado la vida útil de los blindados a causa del desgaste de operar en un terreno y ambiente tan demandante como el de México. Sin embargo es en otras áreas a donde su rezago es mas claro.
Los carros cuentan con un blindaje de tan solo 10 mm que, de acuerdo con todos los usuarios del modelo, siempre se quedo corto en potencia debido a la relación peso-potencia de sus dos motores a gasolina Peugeot V6 de155 hp. Finalmente, los sistemas de mira y control del cañón CN90 F1 de 90 mm aún son ópticos y no cuentan con visión nocturna, por lo que el proyecto de mejora sin duda traerá una mejora operativa significativa a los miembros del arma blindada mexicana.