El buque chileno AFT-67 Lautaro zarpa para incorporarse a la PANC

El remolcador Lautaro comenzó el pasado jueves 14 de diciembre su viaje rumbo a la Antártica para incorporarse a la fase Bravo y así dar inicio a su labor como buque partícipe de la XX versión de la Patrulla Antártica Naval Combinada (PANC), llevada a cabo por las Armadas de Chile y Argentina de forma conjunta.

Esta etapa contempla que la unidad de la Armada de Chile desarrolle su trabajo en el territorio blanco hasta el 22 de enero del 2018. Por otro lado, el buque chileno Galvarino es la otra unidad encargada de continuar con misión de la PANC.

Se debe recalcar que desde el año 1998 ambas Armadas realizan estas labores como una forma de robustecer la confianza entre las naciones. El objetivo es resguardar la seguridad del tránsito de las embarcaciones que navegan las aguas de la zona antártica. De esta forma, en caso de emergencias marítimas, la capacidad de reacción es más oportuna.

Este proceso de vigilancia tiene cuatro fases, comenzó el 15 de noviembre con la Alfa que se dio por finalizada el 17 de diciembre para luego comenzar la fase actual Bravo. Terminada esta etapa, el remolcador dará paso a la Armada Argentina a partir del 23 de enero hasta el 26 de febrero, en la tercera fase denominada Charlie.

Apoyo logístico

Por otro lado, dentro las labores de esta comisión conjunta está también el apoyo logístico que se va a entregar a las bases de la zona, como a la Base Naval Arturo Prat y a la Gobernación Marítima de la Antártica chilena, ambas ubicadas en Bahía Fildes, además de la Base General Bernardo O´Higgins del Ejército de Chile y a Ultramar, un operador de bases nacionales y extranjeras.

Es importante mencionar que el AFT-67 Lautaro fue construido en Noruega en el año 1973 y es del tipo TUG/Supply Vessel. Originalmente fue creado para labores relacionadas con las plataformas petroleras en zonas donde al agua es profunda. Su diseño también le permite navegar en condiciones extremas, es por este motivo que la unidad posee un seakeeping, que es el comportamiento dinámico de un buque en el mar.

El remolcador arribó al puerto de Talcahuano el 12 de diciembre de 1990, lugar donde se le realizó un proceso de “navilización” en los Astilleros y Maestranzas de la Armada (Asmar) para recobrar la maquinaria y de esta forma agregar los equipos y sistemas que requiere para cumplir sus labores.

Está considerado como uno de los principales buques de la PANC, junto al rompehielos Viel y al transporte Aquiles para la misión de patrullaje antártico anual. Sus principales funciones radican en la vigilancia, patrullaje, control oceánico, búsqueda y rescate, además de controlar la contaminación, mantener la señalización, entre otras.