En la segunda parte de la entrevista a Infodefensa, el general Vicente Torres, jefe del MACA, explica cómo marcha el proceso para sustituir los tubos del obús M109 y confirma que existen contactos con la industria para la modernización de esta plataforma. También detalla que en los próximos meses tendrá lugar el primer ejercicio con la nueva munición de alcance extendido de Expal y en mayo están fijadas las pruebas de la munición Excalibur de Raytheon. En ambos casos, con el obus remolcado de 155 mm. El general además señala que la unidad espera recibir este año los primeros RPAS en dotación.
¿Cómo marcha el proceso de sustitución de los tubos del obús M109? ¿Cuál es el alcance de este plan y cuándo estará finalizado?
El proceso se está realizando en el Parque y Centro de Mantenimiento de Sistemas Acorazados (Pcmasa) nº 2 de Segovia y consiste en la sustitución de 75 tubos M284 por otros tubos del mismo modelo. Este proceso durará previsiblemente hasta el año 2022. En el MACA (26 de 28), ya han sido sustituidos los tubos de un obús M-109 del GACA I/11 y de dos obuses del GACA II/11. También se ha iniciado el cambio a otros obuses M-109 de los Grupos de Artillería orgánicos de brigadas que cuentan con este material. Este proceso lleva consigo además una revisión completa de los órganos elásticos y del resto de elementos del obús que participan en el disparo. Una vez finalizado el proceso, los tubos se someten a pruebas de fuego real en el Centro de Ensayos de Torregorda e iniciaremos la validación para el empleo de estos tubos con munición Excalibur y Base Bleed (BB).
¿Hay intención de modernizar otros componentes del obús?
Este MACA está participando en reuniones para iniciar una digitalización de este obús M-109, principalmente de su sistema de navegación y posicionamiento, así como integrar el sistema Talos para automatización del tiro. Esto supondría en su caso un hito en la modernización.
¿Hay fecha para la retirada?
La vida útil estará en función del número de disparos y el empleo del tubo. El hecho de que se esté invirtiendo en sus mejoras, como la ya mencionada de sustitución de los tubos y una posible digitalización de sus sistemas, es indicador que no está prevista esa retirada. Al contrario, seguiremos contando con ese material. No obstante, se está trabajando en un documento de Propuesta de Requisitos de Estado Mayor para la sustitución del Obús ATP M-109. Aquí, es donde se contempla pasar a la versión ruedas. El debate ruedas o cadenas habría que dejarlo de momento, por decirlo de alguna manera, en empate. Creo que esa dualidad debe existir. De cara a la evolución de futuro, las cadenas deben mantenerse en determinadas brigadas y en otras se apostará por las ruedas.
De cara a este 2021 está previsto una revisión de los obuses remolcados 155/52, ¿en qué consistirá este programa?
Estamos ya inmersos en un calendario de revisión, que comenzó 2018, a medida que los obuses llegan a los 12 años desde su recepción. Ahora mismo, trabajamos en la revisión de los 18 primeros obuses 155/52 V07 de dotación en el Regimiento de Artillería de Costa (Racta 4), que entraron en servicio antes. Se trata de una revisión general del obús. En ella se comprueban todos y cada uno de los sistemas de la pieza, inspeccionando principalmente el estado del tubo, freno/recuperador, sistema de atacado y teja, navegador inercial y giróscopo (Milnav), control de puntería automático (CPA) y estado de la trinca de marcha. Esta pieza lleva intrínseca una gran cantidad de sistemas de sensores electrónicos que se desmontan y se comprueban y calibran cada uno de ellos. En el caso de la versión SIAC, la revisión está prevista para dentro de dos años.
¿Qué resultados está dando la nueva munición de alcance extendido de Expal?
La principal novedad es el alcance que ofrece este tipo de munición. Hasta este momento se desconocen los posibles resultados del empleo de esta munición ya que no se pudieron realizar los ejercicios previstos en 2020 como consecuencia de la pandemia. No obstante, el resultado que ha dado con obuses de otros calibres, como el obús Light Gun de 105 mm, en dotación de otras unidades del Ejército de Tierra, ha sido el esperado. Fui testigo de ello puesto que estaba al mando del Grupo de Artillería de Campaña de la Brigada Paracaidista cuando en 2013 realizamos los ejercicios de fuego real en el Centro de Adiestramiento de San Gregorio con esa munición y con un excelente resultado, por cierto. En 2021, tenemos previsto el primer ejercicio de esta munición con el obús remolcado de 155. Con el autopropulsado será más adelante, una vez cambiados los tubos.
¿Qué plazos manejan para la llegada de la munición Excalibur? ¿Cuándo esperan probar esta munición?
En este año está previsto realizar, en el mes de mayo, unas pruebas (fall-back) en el Centro de Ensayos de Torregorda con obuses de 155 de este mando. A partir de esta fecha, y con los resultados obtenidos, esperamos que a lo largo de 2022 y 2023 podamos contar ya con la entrada en servicio y suministro de esta munición. Vamos a llevar todos los hitos de recepción de esta munición, así como adiestramiento en su manejo y mantenimiento desde el Ralca 63. A partir de estas pruebas del próximo mes de mayo, estaremos en disposición de recepcionar y seguir haciendo ejercicios de fuego real con el obús de 155, tanto SIAC como APU V07. Este obús reúne los requisitos que pedimos de precisión, discriminación para evitar daños colaterales y encima permite ir un poco más allá del alcance de un Base Bleed, más allá de 50 kilómetros.
Los drones han pasado a ser fundamentales para localizar objetivos. ¿Cuántos RPAS tienen en la actualidad el mando? ¿Está previsto realizar nuevas compras?
El MACA ha sido pionero en el Ejército de Tierra en el manejo de sistemas RPAS. Desde el año 2006, se ha trabajado con el INTA por medio de encomiendas de gestión en el uso de estos aparatos. También fuimos los primeros en desplegar un RPAS de Clase II (Sistema PASI) en teatro de operaciones (Afganistán) en el año 2009. El GAIL II/63 perteneciente al Ralca 63, cuenta desde el año 2018 con el sistema RPAS Atlantic, fabricado por la empresa Everis/SCR. Este sistema no está en dotación, sino en pruebas dentro del programa Rapaz, con el objetivo de desarrollar durante dos años las capacidades, de forma y manera que el producto final cumpliera con las necesidades operativas de la unidad usuaria. Este sistema está compuesto por dos plataformas Atlantic-1 y una plataforma Tucan para adiestramiento. El empleo táctico de los RPAS en el marco del sistema de apoyos de fuego, permite atender los cometidos de localización y adquisición de objetivos en profundidad y lógicamente es también el medio idóneo para llevar a cabo la evaluación de daños. Estamos a la espera de la decisión para que en este año 2021 contemos en dotación con un sistema que garantice el cumplimiento de las misiones para las que necesitamos los RPAS. El Atlantic es el sistema que tenemos más duro y mejor conocemos, aunque hemos probado otros como el Tarsis de Aertec. Nosotros evaluamos los sistemas y los probados, pero la decisión final será tomada por los responsables de DGAM.
¿Cómo deberá ser la artillería de campaña del futuro?
La artillería del futuro será una artillería donde se valore, sin duda, los efectos de los proyectiles lanzados desde plataformas autónomas que estarán integradas en un sistema de mando y control de apoyos de fuego que, a su vez, sea capaz de planificar y coordinar el empleo de todos los sistemas desplegados y coordinar con el empleo del espacio aéreo y otros actores. En definitiva, una Artillería que exija menos masa de medios (concepto tradicional) y más masa de fuego desde menos plataformas y que también tengan mayor cadencia y lancen municiones con mayor precisión en unos intervalos de distancia que cubran desde los tradicionales 20-70km a los más de 500-700km. En esos intervalos de distancia se deberá garantizar precisión, tanto a la hora de posicionar un objetivo, como a la hora de guiarlo en su trayectoria terminal, así como capacidad de discriminación.
¿Qué implica la mejora de la precisión?
Lógicamente, la mejora de esta precisión permitirá emplear menos disparos para batir con eficacia un objetivo y reducir así la carga logística. He dicho al principio que se valorará los efectos de los proyectiles. En eso me baso también para determinar que, en un futuro, tal vez ya no hablemos de tres tipos de artillería para objetivos terrestres, navales y aéreos. Hoy en día ya tenemos superada la capacidad para batir de manera indistinta objetivos terrestres o navales. No dudo que los sistemas de localización y adquisición de objetivos desarrollen un abanico de posibilidades que vayan desde la localización de objetivos en movimiento sobre terreno, sobre mar o, incluso, en el espacio. Tal vez la munición merodeadora sea otro hito de futuro a la hora de controlar el espacio aéreo. Una Artillería que deberá mantener su actual vocación de ser una capacidad integrada, no solo como sistema de sistema, sino en la organización operativa a la que apoya o como parte de otros sistemas conjuntos y, en su caso, combinados.