La fragata española Navarra, buque de mando de la operación Atalanta de lucha contra la piratería en el océano Índico, interceptó y liberó el martes por la mañana a un pesquero yemení que llevaba cuatro días secuestrado por un grupo de piratas somalíes.
"La liberación ha sido resultado de una operación de vigilancia y seguimiento liderada por el buque español tras recibir, el pasado domingo 21, una información sobre un posible ataque pirata ocurrido en aguas del océano Índico", según comunicó el Estado Mayor de la Defensa (Emad).
La operación se inició después de que un pesquero español y otro coreano recibieran por parte de un esquife un ataque con lanzagranadas que pudieron repeler con la intervención del equipo de seguridad privada a bordo, gracias a las medidas de protección BMP (Best Management Practises).
Tras conocer los hechos, el comandante de la Fuerza, contralmirante Ricardo A. Hernández López, embarcado en la fragata Navarra, ordenó la salida a la mar del buque, que se encontraba en el puerto de Mombasa, para proceder a buscar e interceptar a los piratas. Al mismo tiempo, ordenó al avión de patrulla marítima alemán P3-C dirigirse a la zona donde ocurrieron los ataques para tratar de localizar el esquife y proporcionar información a la fragata.
Durante esta búsqueda el P3-C localizó un pesquero estilo jabeque (dhow) yemení remolcando varios esquifes. El Emad explica que "tras comprobar que el dhow, coincidía con uno que había sido secuestrado cuatro días antes en aguas somalíes, el comandante de la Fuerza estimó que podría estar siendo usado como buque nodriza desde el que lanzar los ataques piratas y se valoró la posible existencia de rehenes a bordo".
La información obtenida por el avión alemán fue ratificada posteriormente por el avión de patrulla marítima español P3-M. Con esta información, la fragata Navarra logró -después de 28 horas de navegación- localizar el pesquero en la madrugada del martes y comprobó que se dirigía hacia una zona cercana a campamentos piratas conocidos en la costa somalí.
"Tras alcanzar la posición del dhow, la Navarra se mantuvo haciendo seguimiento encubierto hasta que el equipo de guerra naval especial llevó a cabo, con éxito, la operación de abordaje", describe el Emad. La operación está todavía abierta y el personal del buque español junto con el equipo de guerra naval especial continúan recabando información sobre el incidente.