El Gobierno dio luz verde el pasado viernes en la reunión del Consejo de Ministros al contrato para la adquisición de Fenyx, la futura aeronave de investigación y experimentación del Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA) Esteban Terradas, por un valor estimado de 34 millones de euros.
Este nuevo avión de gran carga y autonomía garantizará la investigación desde la atmósfera en España en el futuro e incrementará las capacidades actuales. El plazo de ejecución del contrato se extiende desde su firma hasta el 31 de octubre de 2021.
La referencia del Consejo de Ministros señala que "las plataformas aéreas de investigación son herramientas necesarias para la realización de gran parte de los proyectos en determinados campos científicos, en especial en el medioambiental -tanto desde el aspecto atmosférico como de observación de la Tierra-, siendo un elemento indispensable en muchas ramas científicas para obtener datos de la Tierra o de la misma atmósfera en muy distintas zonas del globo y a diferentes alturas".
También explica que los países europeos líderes en investigación con medios aéreos disponen de distintos tipos de plataformas de investigación. Estos países participan en el programa Eufar, una iniciativa de integración de infraestructuras, constituida actualmente por 24 instituciones europeas que operan más de 30 aviones instrumentados. España está presente con los aviones de investigación atmosférica y de teledetección del INTA.
Por otro lado, añade, "la obsolescencia que presentan los actuales aviones del INTA, con periodos cada vez más altos de mantenimiento, y dificultad a la hora de obtener repuestos, limitan sustancialmente el servicio ofrecido a la comunidad científica".
En enero de 2018, el Gobierno autorizó la suscripción de un convenio de colaboración entre el Ministerio de Economía, Industria y Competitividad y el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial para la puesta en marcha del Proyecto Fenyx-Gran Aeronave de Investigación y Experimentación.
El Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder), en el marco del Programa Operativo de Crecimiento Inteligente 2014-2020 (Pocint), aportará 28 millones de euros, el 80 por ciento de la financiación total. Esta partida llegará al proyecto a través del Ministerio de Economía. Por su parte, el INTA realizará la aportación correspondiente a la financiación nacional fijada en siete millones de euros, el 20 por ciento restante.
El INTA dispone en estos momentos de tres Plataformas Aéreas de Investigación (PAI): dos C212-200, adquiridos en 1994, y un motovelero Stemme S15. Uno de los principales motivos para la adquisición de la nueva aeronave de investigación es la obsolescencia que presentan precisamente los C212.