El mortero embarcado Eimos de 81 mm acaba de llegar al Ejército del Aire y del Espacio. Los boinas negras del Escuadrón de Apoyo al Despliegue Aéreo (EADA) han recibido en su cuartel general en la base aérea de Zaragoza las tres primeras unidades del sistema de fuego indirecto de Rheinmetall Expal Munitions instalado sobre el Vamtac ST5 de Urovesa.
Este lote forma parte del contrato marco firmado por la empresa y el Ejército de Tierra en octubre del año pasado para el suministro de 84 morteros Eimos -vehículo y trabajos de integración incluidos- por 134 millones de euros durante un periodo de tres años. El acuerdo incluye unidades para el propio Ejército de Tierra y también para el Ejército del Aire y del Espacio y la Armada.
En el caso del EADA, el sistema de mortero sobre vehículo permite incrementar la potencia de fuego de una unidad que es la primera en llegar a zona de operaciones y la última en replegar en cualquier despliegue del Ejército del Aire y del Espacio.
El Eimos sobre Vamtac ST5 entró en servicio primero a la Infantería de Marina en 2021 y después, más recientemente, en el Ejército de Tierra, en concreto, en la Brigada Paracaidista y en la Brigada Galicia VII, como recogió Infodefensa.com. La producción de este sistema de mortero embarcado se realiza en las instalaciones en Albacete de Rheinmetall Expal Munitions, filial española del gigante alemán Rheinmetall.
Este mortero embarcado calibre de 81 mm, adaptado sobre plataforma de alta movilidad Vamtac ST5, tiene capacidad para operaciones de alta movilidad terrestre y desembarco, que permiten una rápida entrada en posición y abandonar esta tras el fuego (shoot and scout). El mortero cuenta con una serie de características principales como tiro a 360 grados, sin cambiar de posición u orientación del vehículo y sin necesidad de desplegar estabilizadores adicionales. También dispone de una alta precisión gracias a una unidad de navegación inercial de última generación.
Además, el Eimos se integra en el sistema de mando y control de artillería Talos para recibir y enviar información a otras unidades, puestos de mando y observadores avanzados. El vehículo Vamtac ST5, por su parte, tiene capacidad para transportar 82 granadas y un vadeo profundo de hasta 1,5 metros, lo que permite misiones de desembarco e incluso cruzar ríos.
Según detalla el Ejército de Tierra, este mortero embarcado aportará una gran versatilidad y protección en el apoyo al fuego directo para pequeñas unidades tipo batallón y compañía, ya que constituye un sistema robusto, tecnológicamente avanzado, con una alta cadencia de fuego (15 disparos por minuto) y dotado de un sistema hidroneumático avanzado que permite la alta absorción del retroceso de la pieza reduciendo drásticamente los esfuerzos y vibraciones transmitidas al vehículo.
Los sistemas de mortero sobre vehículos pueden ser empleados tanto en escenarios de conflictos convencionales como en aquellos asimétricos que se dan en las operaciones en las que actualmente están presentes las Fuerzas Armadas españolas.