El Ejército avanza en la modernización de sus comunicaciones con un sistema de radioenlace troposférico de Aicox

Los avances tecnológicos dibujan un futuro campo de batalla digital e hiperconectado donde las comunicaciones serán tan importantes como disponer de vehículos o armamento de última generación. Sin radios, sistema de mando y control o un enlace robusto, las unidades de una brigada en este escenario no serán más que elementos aislados.

Para responder a este desafío, el Ejército de Tierra trabaja en diferentes frentes entre los que se encuentra la renovación de los equipos de comunicaciones. Entre las actuaciones recientes destaca la adquisición de un Sistema de Radioenlace Troposférico (Tropos) a la empresa española Aicox. El contrato, gestionado por el Mando de Apoyo Logístico del Ejército (MALE), tiene un presupuesto de 7,3 millones de euros. 

Este interesante sistema permite establecer la conexión entre dos ubicaciones distintas: sin línea de vista directa; con velocidades que pueden llegar hasta los 210 Mbps; a distancias más allá de la línea del horizonte (hasta 250 kilómetros); y sin necesidad de la intervención de un satélite (LEO o GEO). 

La solución de Aicox ha sido seleccionada después de varias pruebas con éxito en los ejercicios Tiwar en la base de Marines (Valencia) con el Regimiento de Transmisiones nº 21. El sistema ofrece rapidez en la disponibilidad del enlace; solo hay que hacer el montaje del sistema en ambas ubicaciones, proporcionar alimentación y apuntarlos el uno contra el otro.

"Para esto último, el sistema cuenta con un software específico que permite que un usuario adiestrado establezca el enlace en cuestión de menos de un minuto", explica el fabricante. También proporciona independencia de otras infraestructuras de comunicación, es decir, no hay que tener el apoyo de otras redes terrestres o satelitales ya existentes. 

Tampoco es necesario usar ni comunicar a ningún elemento externo a los dos puntos de comunicación, las coordenadas GPS de los emplazamientos. A estas ventajas además hay que sumar el ahorro de costes operativos; puesto que no hay que pagar la mensualidad de ningún segmento satelital alquilado.