La corporación noruega Kongsberg Maritime se ha adjudicado un contrato para el suministro de los dos ejes de propulsión y las hélices de las futuras fragatas misileras HDF-3200 que construyen SIMA Perú y Hyundai Heavy Industries (HHI) para la Marina de Guerra del Perú.
Bajo la denominación de Buque Multirol, la Armada del Perú lleva adelante un programa para la construcción de seis fragatas multipropósito para reemplazar a las fragatas Lupo que han prestado servicio desde la década del '70.
Las fragatas seleccionadas por la Armada del Perú se basan en el diseño HDF-3200, que está siendo adaptado a los requerimientos del instituto tutelar peruano para desplazar unas 3.400 toneladas métricas, 127 metros de eslora, desarrollar una velocidad máxima de 26,4 nudos, tener una autonomía de 6.000 millas náuticas (11.112 kilómetros), hangar y cubierta de vuelo en popa con capacidad para operaciones navales con un helicóptero mediano y probablemente vehículos aéreos no tripulados, puente de mando integrado y, de acuerdo a las imágenes disponibles, un cañón principal en proa de 76 mm y detrás del mismo una célula de lanzamiento vertical de misiles con capacidad para disparar varios tipos de misiles, contenedor para misiles antibuque en la sección media del navío, arma de defensa cercana CIWS sobre el hangar, entre otros.
El contrato adjudicado a Kongbserg Maritime comprende la manufactura, pruebas y entrega de dos ejes de propulsión, sellos, rodajes, cojinetes, sistema de control, accesorios y sendas hélices de paso controlable (controllable pitch propellers). Las hélices de paso controlable permiten cambiar la dirección de traslado del navío, adelante o atrás, sin modificar el sentido de rotación de los motores a bordo y se manufacturan a la medida del buque, según las especificaciones técnicas planteadas por el cliente.
Las capacidades de estas hélices, una variación de las hélices de paso variable, se acomodan al tipo de operaciones que puede desempeñar un navío de guerra, como por ejemplo la demandante guerra antisubmarina, para lo cual el diseño y acoplamiento de componentes a bordo no debe generar ruidos o vibraciones innecesarias.
El ángulo de las palas puede ser ajustado para generar mayor eficiencia a diferentes velocidades y bajo diferentes condiciones de carga. Los ajustes se pueden hacer mediante un sistema hidráulico o eléctrico. Es precisamente ese cambio de ángulo el que permite que el navío cambie de dirección sin mayor trámite y favorecer las operaciones en zonas litorales de calado reducido, en zonas de espacios reducidos o en condiciones en las que se requieren maniobras rápidas.