Las Fuerzas Armadas Argentinas llevaron a cabo durante diez días el ejercicio Aonikenk en la Base de Infantería de Marina Baterías. Este ejercicio se enmarca dentro del programa anual de adiestramiento de las fuerzas y ha contado con la participación de más de 2.000 efectivos, junto a una multiplicidad de medios aéreos, terrestres y navales.
El enfoque principal estuvo en el planeamiento y ejecución de operaciones multidominio, un concepto que refleja la convergencia de las esferas de tierra, mar, aire, espacio, ciberespacio y la información en el campo de batalla moderno.
Durante el ejercicio, las tropas llevaron a cabo una amplia gama de maniobras y simulaciones operativas. En el ámbito terrestre, el despliegue de tanques TAM y cazacarros Sk-105 del Ejército Argentino fue crucial en las operaciones de ataque, mientras que la Infantería de Marina ejecutó desembarcos anfibios y aseguró cabezas de playa. Estas acciones fueron respaldadas por lanzamientos de paracaidistas desde aviones C-130H Hercules de la Fuerza Aérea, complementando las maniobras con vehículos anfibios y medios de la Flota de Mar.
Ejercicio Aonikenk. Firma: Min Def.
El ejercicio también incluyó disparos de artillería con piezas Citer de 155 mm en misiones de apoyo de fuego, además del empleo de helicópteros UH-1H y AB-206B1 en tareas de transporte y apoyo táctico. En el componente antiaéreo, se desplegaron misiles RBS-70 y cañones Oerlikon de 35 mm, integrados al sistema Skyguard, junto con radares y tecnologías anti-drones. La incorporación de municiones merodeadoras UVision HERO-30 destacó el uso de tecnologías avanzadas en las operaciones conjuntas.
Desde la Base Aeronaval Comandante Espora, aviones IA-63 Pampa III de la Xma Brigada Aérea participaron en operaciones de apoyo aéreo, realizando lanzamientos de bombas de práctica, así como de bombas de 125 kg y 250 kg.
Ejercicio Aonikenk. Firma: Min Def.
Una característica fundamental del ejercicio Aonikenk ha sido la creación de un puesto de comando multidominio, organizado en nodos y células. Este tipo de comando permite una organización flexible del Estado Mayor, integrando operaciones aéreas, marítimas y terrestres en un esquema conjunto. Esta estructura busca maximizar la efectividad de las operaciones militares mediante la coordinación secuencial e integrada de acciones en los diferentes dominios. Además, se ha puesto un fuerte énfasis en el procesamiento de información en tiempo real, lo que ha permitido a las fuerzas ajustar sus tácticas rápidamente en respuesta a las nuevas situaciones que surgían durante el ejercicio, sin afectar el cumplimiento de la misión.
El concepto de guerra multidominio ha ganado relevancia en los últimos años debido a la transformación de los conflictos bélicos. Los dominios tradicionales, como tierra, mar y aire, se están expandiendo hacia el espacio y el ciberespacio, creando nuevos escenarios para la competencia y confrontación. En este contexto, el avance de tecnologías emergentes, como la inteligencia artificial y los sistemas de armas autónomos, junto con las amenazas de ciberataques y campañas de desinformación, está cambiando la forma en que se conciben y ejecutan las operaciones militares.
Ejercicio Aonikenk. Firma: Min Def.
Estos ejercicios refuerzan la capacidad operativa de las Fuerzas Armadas Argentinas, preparándolas para enfrentar escenarios cada vez más complejos en un entorno multidominio. Aonikenk, al combinar capacidades tradicionales con tecnologías emergentes, marca un avance significativo en la adaptación militar ante los desafíos de los conflictos modernos. La coordinación eficiente de recursos desplegados en diversos dominios resulta esencial para garantizar el éxito en operaciones de gran escala, donde la integración de alta tecnología y la flexibilidad táctica son determinantes.
Ejercicio Aonikenk. Firma: Min Def.