El presidente de Bolivia, Luis Arce Catacora, planteó la necesidad de fortalecer y reformar las Fuerzas Armadas con nuevos objetivos y acciones estratégicas institucionales para evitar que se repitan golpes de Estado. La propuesta la hizo durante los actos conmemorativos al 199 aniversario de la institución militar, que tuvo lugar el 7 de agosto en la ciudad de Trinidad, departamento del Beni.
El mandatario, haciendo referencia a los sucesos ocurridos en el país en noviembre de 2019 y el pasado 26 de junio indicó que, en “este último periodo se han producido dos momentos críticos de ruptura o de crisis antidemocrática de parte de unos cuantos malos militares que han sido seducidos por intereses personales y de grupos de poder ante lo cual es imperativo encontrar soluciones para evitar que estos momentos de crisis se repitan y podamos avanzar con firmeza en nuestro modelo de Estado Plurinacional y sistema de gobierno democrático donde las Fuerzas Armadas tienen su rol”.
En ese contexto, Arce planteó la necesidad del fortalecimiento institucional que incluya la definición de nuevos objetivos y acciones estratégicas institucionales; además de una visión de futuro, a corto, mediano y largo plazo; un renovado marco legal adecuado a la Constitución Política del Estado; y la formulación y actualización de la doctrina militar que establezca las bases lectoras del pensamiento y proceder estratégico con identidad propia.
Transparencia y Derechos Humanos
Asimismo, el presidente señaló que la institución armada debe enmarcar su accionar en la transparencia y la lucha contra la corrupción; debe ser una institución con profundo respeto a los derechos humanos, a la par de promover la equidad y eliminar el patriarcalismo en sus filas, para obtener líderes con vocación de servicio incondicional a la patria, y remarcó que todo esto “constituye en un nuevo lineamiento estratégico para las Fuerzas Armadas”.
Eficiencia
El presidente puntualizó que Bolivia necesita militares competentes en la ciencia y arte militar, resultado de la pericia en el manejo de los sistemas de armas, pero es decisivo guiar su desarrollo profesional forjando su entidad como un servidor público que presta un servicio incondicional a la patria, su ética profesional debe ser intachable, englobando los valores democráticos y ante todo patrióticos para así reflejarlos en nuestra sociedad.