En desarrollo de los acuerdos de transferencia de material de fabricación rusa (o exsoviética) firmados en enero pasado, la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE) entregará a los Estados Unidos sus seis sistemas misilísticos de defensa antiaérea del tipo MAPO 9M33 OSA-AKM (SA-8B Gecko Mod-1).
Tal como lo anunció en su momento el presidente Daniel Noboa, este acuerdo implica la entrega de material a cambio de nuevos sistemas de fabricación estadounidense y que incluirán además procesos de entrenamiento, capacitación, soporte, suministro de repuestos y asistencia técnica permanente.
Operatividad
En este sentido se confirma el traspaso del principal medio de defensa antiaérea de Ecuador. Actualmente los vehículos se encuentran desplegados a través del Escuadrón OSA-AKM No. 2114 del Ala de Combate No. 21 Taura, pero se desconoce si están en condiciones operacionales. Existe información que indica que para el año 2020 se hicieron estudios para su mantenimiento y modernización, pero el proceso se interrumpió por la invasión rusa a Ucrania.
Los OSA-AKM ecuatorianos disponen de seis misiles 9M33M3 (de 170 kilogramos, con una ojiva de 40 kilogramos) por lanzador, con un altitud máxima de 12.000 metros, pero con radios de alcance de hasta 15.000 metros, acomodando el sistema de identificación amigo-enemigo (IFF).
Transferencia de refuerzo
Existe la posibilidad de que los sistemas sean transferidos a las Fuerzas Armadas ucranianas (país que en su momento los vendió al Ecuador), que al parecer cuentan con la variante 9K33M2 OSA-AK, pero no está confirmado si tienen la variante AKM. De hecho y hasta mediados de 2023, Ucrania había perdido 18 de estos sistemas (tres de ellos reparables) pero destruyó seis y capturó seis más de las Fuerzas Armadas rusas.
Las unidades ecuatorianas supondrán entonces un importante refuerzo de las capacidades de defensa contraaérea de corto alcance para Ucrania, compensando además las pérdidas sufridas y aumentando los inventarios de este tipo de modelo en particular.