A continuación puede leer las primeras líneas de uno de los últimos reportajes publicados por Infodefensa.com en el diario La Razón, una colaboración que ya tiene casi cinco años
Durante las últimas dos décadas, los avances tecnológicos y desarrollos llevados a cabo en el ámbito de los sistemas no tripulados han consolidado a los drones como un activo militar fundamental. Progresivamente, las fuerzas armadas de todo el mundo están implementando en sus operaciones vehículos remotos aéreos, terrestres, navales o submarinos, aprovechando las ventajas que ofrecen para una amplia variedad de misiones, con la finalidad de reducir la exposición de los soldados al peligro y de lograr una ventaja táctica y estratégica sobre el enemigo.
En España, la adquisición de estos equipos no ha avanzado al mismo ritmo que en otros países, sino que se ha tratado de un proceso más gradual. No obstante, desde la aparición de esta tecnología, el Ministerio de Defensa ha tenido en cuenta las necesidades de los militares en este campo y ha realizado importantes inversiones, por lo que el Ejército del Aire y del Espacio, el Ejército de Tierra y la Armada, ya disponen de un variado arsenal de plataformas de combate y reconocimiento para el refuerzo de sus capacidades. La proliferación de los sistemas no tripulados militares no solo implica el desarrollo de nuevas tecnologías y estrategias de combate, sino que lleva también aparejada la necesidad de construir nuevas infraestructuras o renovar las existentes, para adaptarse a los requisitos más modernos, lograr una integración efectiva con otros activos y permitir el despliegue y recuperación de vehículos de distinto tipo, tamaño y características.