El Ejército de Tierra tiene previsto adjudicar a principios de 2024 el contrato valorado en 208 millones de euros para el mantenimiento y actualización de la flota de carros de combate Leopardo de las versiones 2E y 2A4.
El gran candidato a este contrato es Santa Bárbara Sistemas y, más concretamente, su planta en Alcalá de Guadaíra (Sevilla), especializada en el ciclo de vida de sistemas de armas como obuses, carros de combate o vehículos de cadenas. La secretaria de Estado de Defensa, Amparo Valcarce, ya deslizó la semana pasada que estas instalaciones tendrían un papel importante en el contrato.
En el acto de entrega de los primeros seis vehículos de zapadores Castor, Valcarce dijo que “tenemos en marcha una adjudicación que el Ejército de Tierra va a hacer muy en breve para el sostenimiento de los vehículos Leopard que para nosotros es muy importante porque es la base del funcionamiento de la factoría de Alcalá de Guadaíra, todo son buenas noticias para esta factoría”.
Por primera vez desde la entrada en servicio de los Leopardo 2E a principios de los 2000, el Ejército de Tierra gestionará todas las necesidades de mantenimiento de los vehículos a través de un único expediente. Este contrato también es el de mayor importe hasta la fecha relacionado con el sostenimiento de estos carros de combate. Junto con los trabajos habituales de mantenimiento, reparación y suministro de componentes, el expediente incluye además algunas modernizaciones en los carros.
El plazo para presentar las ofertas a la licitación finalizó el pasado 30 de octubre. El contrato tendrá una duración de dos años (2024-2025), con opción a una prórroga por otros dos más (2026-2027). El presupuesto inicial es de 126 millones con IVA: 105 millones para la flota de Leopardo 2E y 21 millones para la versión Leopard 2A4. El valor estimado asciende hasta los 208 millones al sumar el importe de los dos primeros años sin impuestos (104 millones) y la posible prórroga (otros 104 millones).
El contrato contempla “las revisiones, reparaciones, modificaciones, adaptaciones, pruebas y demás trabajos relacionados con el mantenimiento que en cada caso sean necesarios para devolver a los sistemas, conjuntos y subconjuntos que componen los vehículos a la condición de perfecto estado de funcionamiento”. También incluye el mantenimiento evolutivo, es decir, el estudio y el análisis de las obsolescencias o mejoras en los vehículos “en cualquiera de las fases de su ciclo de vida” en los sistemas, subsistemas y componentes que se considere necesario.
Flota española de Leopard
La Fuerza Terrestre opera 239 carros Leopardo de la versión 2E repartidos por las brigadas mecanizadas Extremadura (Bótoa, Badajoz), Guadarrama (El Goloso, Madrid), Guzmán el Bueno (Cerro Muriano, Córdoba) y Aragón (Zaragoza). Del total, 219, son carros de línea; 16 de recuperación y cuatro carros escuela.
Un pequeño grupo de Leopardo 2E está desplegado fuera de España. Desde 2019, el Ejército de Tierra tiene media docena de estos carros en la misión Presencia Avanzada Reforzada de la OTAN en Letonia. En concreto, en la base de Adazi donde se encuentra el grueso del contingente español desplegado en esta operación.
Leopard 2A4 para Ucrania
España cuenta además con 98 carros de combate Leopard 2A4, después de la donación de una decena a Ucrania. Este lote se ha reparado en la primera mitad de este año en las instalaciones de Santa Bárbara Sistemas en Alcalá de Guadaira (Sevilla). Otros 43 están almacenados en el cuartel del Ejército de Tierra en Casetas, un barrio de Zaragoza, de donde han salido los carros para Ucrania. En torno a 40 se encuentran desplegados en las comandancias de Ceuta y Melilla y alrededor de una docena forman parte de la conocida como Unidad Enemiga del campo de maniobras de San Gregorio. Estos últimos se utilizan principalmente como fuerza de oposición en los ejercicios.
NEWSLETTER
ALERTAS
