El patrullero de altura Serviola y la fragata Méndez Núñez de la Armada han seguido de cerca a la fragata rusa 417 Admiral Gorshkov, equipada con misiles hipersónicos Zirkon, durante su navegación por aguas del Atlántico tras dejar atrás el canal de la Mancha.
El Estado Mayor de la Defensa, responsable del operativo, explica que el seguimiento y monitorización de los movimientos de la fragata rusa forma parte "de un procedimiento habitual cuando buques de otros países navegan por aguas de interés nacional y se enmarca en las Operaciones Permanentes de vigilancia y disuasión".
No obstante, la presencia del buque ruso en aguas próximas a las españolas adquiere una especial relevancia en un momento de máxima tensión entre la OTAN y la Federación rusa por la guerra en Ucrania. Otros países aliados como Reino Unido o Francia han hecho también seguimiento de esta fragata.
Emad detalla que "el viernes 13 se realizó la interceptación del buque ruso 20 nm al norte de la Zona Económica Exclusiva (ZEE) española y comenzó el seguimiento por el patrullero". Hasta ese momento había realizado el seguimiento la fragata francesa D656 Bretagne y, anteriormente, buques de los distintos países por cuyas aguas había navegado la fragata rusa desde que salió de aguas rusas.
El mismo viernes, la fragata F-104 Méndez Núñez, que había salido a la mar desde el Arsenal de Ferrol el jueves 12 por la tarde, relevaba al P-71 Serviola para continuar con la monitorización del buque ruso hasta aguas portuguesas. "Este seguimiento se cedió el sábado a las autoridades portuguesas, ya que habría salido de nuestro espacio marítimo de interés", informa el Estado Mayor.
Un avión D4 CN235 de vigilancia marítima del Ejército del Aire y del Espacio también participó en el operativo de localización y seguimiento del buque ruso.